El mundo del pádel centra esta semana la atención en Andalucía, el FIP Platinum de Marbella y el A1 de Sevilla, pero las grandes estrellas ya están centradas en el P2 de Premier Padel que tendrá lugar la próxima semana en Egipto y, sobre todo, en el Mundial de Qatar, que llega a continuación y en el que la selección masculina tiene ganas de revancha después de la derrota que le infligió Argentina hace dos años.
El conjunto que ha seleccionado Juanjo Gutiérrez es el favorito si nos atenemos al ránking. Los Arturo Coello, Ale Galán, Juan Lebrón, Paquito Navarro, Jon Sanz, Coki Nieto, Mike Yanguas y Álex Ruiz son un conjunto de garantías que ofrece muchas posibilidades a la hora de combinar y que permitirá jugar con la estrategia.
No obstante, de igual forma que hay combinaciones, hay dudas. Y casi todas señalan a Juan Lebrón. En principio, por los problemas que ha tenido este año con algún compañero y tras su separación de Ale Galán, algo que no preocupa al seleccionador español, pero también porque es el que más puede variar en esas combinaciones, ya que puede jugar tanto en el drive como en el revés. No obstante, Juanjo Gutiérrez lo tiene muy claro. "Lebrón tiene, por suerte, la capacidad de jugar en ambos lados, pero a día de hoy viene para jugar de revés como está compitiendo ahora", advierte en una entrevista con Relevo, donde deja claro con ello que el gaditano difícilmente podrá formar una de las parejas más lógicas con sus excompañeros Paquito Navarro y Ale Galán, que también juegan en el revés.
"No se puede descartar nada en un Mundial de pádel con jugadores de nivel tan alto y que se conocen desde hace tanto tiempo. Pero repito, Juan -Lebrón- viene a la selección para jugar de revés", afirma Gutiérrez, quien avisa que lo que se ve desde fuera entre Lebrón y Galán no es lo que parece. "No creo que sea tan mala -la relación- como parece. Ellos, a mí individualmente, me han comentado que no tienen ningún problema en convivir juntos, en estar juntos en el equipo. Son dos jugadores que siempre han mostrado una gran predisposición para competir por España. Es un grupo que nos conocemos desde hace mucho tiempo, en el que siempre se ha generado muy buena dinámica durante las semanas de mundiales. Esta competición siempre ayuda, siempre suma", añade.
"No solo está la tensión de Galán y Lebrón. También está la tensión que ha tenido Yanguas con algún compañero de la selección, pero bueno, se van disipando con el tiempo. Por eso digo que un Mundial, competir con tu país, siempre te acaba ayudando. Si estás pasando por un bache es muy probable que te ayude y que lo superes", afirma el seleccionador español, quien también reconoce las ganas de revancha que hay tras la derrota de hace dos años. "Las ganas de revancha son normales, evidentemente, con todos los valores positivos del deporte intrínsecos. Una revancha sana", advierte.