CICLISMO

Baño de realidad para Vingegaard en la París-Niza

El ciclista de Visma está por ahora muy lejos de su estado de forma óptimo, lo cual fue aprovechado por Joao Almeida para arrebatarle la victoria de la 4ª etapa en los últimos metros

Baño de realidad para Vingegaard en la París-Niza
Jonas Vingegaard, disputando la actual edición de la París-Niza - CORDON PRESS
Alvaro ArenillasAlvaro Arenillas 5 min lectura

Cuando uno habla de Tadej Pogacar o de Jonas Vingegaard lo hace de dos ciclistas a los que se les presupone que arrasan allá por donde van. Entre ambos han copado las últimas cinco coronas del Tour de Francia y de cara a este 2025 apuntan a repetir duelo. Pues bien, el danés, quien espera reconquistar el mencionado trono, se ha llevado un duro golpe en la cuarta etapa de la París-Niza, donde se le ha visto falto de piernas hasta el punto de verse rebasado en los últimos metros por Joao Almeida, quien se ha hecho con el triunfo parcial de la carrera disputada entre Vichy y La Loge des Gardes, de 163,4 kilómetros y con final en alto.

En una etapa neutralizada en el último tercio por una granizada, lo mejor llegó al final con la batalla entre los favoritos: Vingegaard, escapada dentro del último kilómetro volaba hacia la victoria, pero el portugués Joao Almeida (Caldas da Rainha, 26 años) apareció cerca de la línea de meta para alzar los brazos como vencedor. Pese a no poder conseguir el triunfo parcial, Vingegaard se hizo con el maillot amarillo de líder, el cual arrebató a su compañero estadounidense Matteo Jorgenson.

La tercera plaza fue para otro danés, Matias Skjelmose (Lidl), a 2 segundos, seguido del francés Lenny Martínez a 6, mismo tiempo que Jorgenson. La octava plaza para el colombiano Harold Tejada (Astana), siempre con los mejores. El primer español fue Pablo Castrillo (Movistar), a 28. Como decíamos, en la general manda Vingegaard, en ascenso en su estado de forma, con 5 segundos sobre Jorgenson y 33 respecto a Skjelmose. Almeida, uno de los favoritos, es quinto a 37; Castrillo, décimo a 1.22; y Tejada, duodécimo, a 1.25.

Antes de que se resolviese la etapa, todo se complicó tras el paso de la Cota de Canon, momento en el que la organización decidió neutralizar la prueba. El motivo fueron unos minutos de intensa granizada que alteró las condiciones de la calzada y produjo algunos accidentes en vehículos de carrera.

Reanudación de la carrera

Fue a 28,8 km. de la cima de la Loge des Gardes cuando se reanudó la etapa con 7 escapados por delante. Entre los miembros del pelotón, hubo quejas de que algunos no estaban a la hora de la reanudar la marcha por refugiarse en los coches de equipo. El noruego Leknessund decidió mantener el ataque en solitario, ajeno a un pelotón que ya volaba en busca del escenario clave del día. El nórdico fue atrapado por sus compañeros de escapada antes del penúltimo puerto. Otra vez 8 por delante con 3 hombres del Ineos delante. A la caza, el UAE tratando de colocar a sus hombres antes del último puerto. El Visma de Jorgenson y Vingegaard, a la expectativa.

Y con la mayoría de los fugados cazados, fue Tobias Foss quien intentó una aventura en solitario que simplemente no cuajó porque por detrás ya iban lanzados. Le cogieron, Vingegaard salió disparado hacia la victoria, pero este terminó siendo para un espectacular Almeida.

La quinta etapa

Este jueves se disputa la quinta etapa entre Saint-Just-en-Chevalet y La Côte-Saint-André, de 203,3 kilómetros. Jornada ondulada de media montaña con 6 dificultades y final en alto, en un muro de 1,7 km al 11 por ciento. Antes, el menú ofrece la Colina de Saint Polgues (3a, 1,5 km. al 5,6) apenas tomada la salida, para continuar con la Cota de Trier (3a, 2,3 km. al 5,8) a mitad de recorrido. En el último tercio traca de subidas, con la Cota du Chateau Jaune (3a, 1,2 al 9,3), Cota de Sibuze (3a, 1,1 km al 8,3), Cota de Chavagneux (3a, 1 km al 8,3), Cota D'Arzay (3a, 1,3 km al 7,9), Portes des Bonneval (2a, 1,3 km al 7,9) y ascenso a meta 1,7 km al 11). Una jornada para que se expliquen los favoritos.