Antonio José Medina6 min lecturaAl contrario que con Jorge Martín, hablar del futuro equipo de Marc Márquez es una odisea cuando apenas ha comenzado su etapa en Gresini y en Ducati. El piloto catalán sigue pendiente de adaptarse a su nueva moto y de ganarse en la pista poder elegir qué hacer la próxima temporada. Así lo ha dejado claro a su llegada a Portimao, donde este fin de semana va a disputar el Gran Premio de Portugal de MotoGP, donde ha preferido extenderse en lo que debe hacer más que en hablar de contratos.
"Ahora mismo no tengo prisa en hablar de futuro. Quiero concentrarme en mí mismo, tratar de dar el máximo en la pista, y sé que sí disfruto, tendré más posibilidades para escoger plaza", avisa un Marc Márquez que tiene claro una cosa, que su "situación es completamente distinta a la del pasado".
Su situación es la que viene repitiendo en los últimos meses. Sigue teniendo el carisma de siempre, pero lleva años sin ganar un gran premio. Y ese es su primer objetivo. Pero, para lograrlo, debe mejorar con la Ducati GP23.
"Sé que en el deporte lo importante es el presente, no el pasado. La situación actual es así y tengo como dos o tres pilotos, como mínimo, que van más rápido que yo", destaca Marc Márquez, a quien desde el equipo le han dado un margen de tiempo, pero no por eso están menos necesitado. "La presión es la misma -que cuando estaba en Honda-, porque los pilotos y los equipos están contentos si consiguen el podio, y ese es el objetivo que se marca este equipo. Tener buen ambiente, divertirse y hacer bromas no significa que en el equipo no tenga ambición. Es la misma que en uno de fábrica", señala desde Portimao.
"Es verdad que -en Gresini Racing- hay menos personas y el ambiente es más familiar. Es una cultura distinta entre una marca japonesa y una italiana o española, pero cualquier ambiente es bueno si los resultados son buenos", avisa sobre sus objetivos, al tiempo que señala que no quiere ir de víctima sobre si tiene o no una peor moto que el equipo oficial y que Pramac. "Yo tengo lo que tengo y, en mi caso, me siento mejor que el año pasado. Es una moto con la que me siento muy bien. Por supuesto, la de 2024 será mejor en algunos puntos, pero en la de 2023 tenemos la experiencia del año pasado y tenemos que valernos de ella y tratar de entender 'cositas'. La verdad es que creo que todavía no he descubierto todo el potencial y tengo que tratar de ir entendiendo cómo usar todo el de esta moto", señala.
En este sentido, sí valora positivamente los pasos dados hasta ahora. "De momento me estoy acoplando bastante bien, pero el técnico me tiene que conocer a mí, yo al técnico, lo que necesita la moto en cada momento a nivel de estilo de pilotaje...", avisa.
"He podido ver que es una moto bastante diferente a lo que estaba acostumbrado con la Honda cuando vas detrás de algún piloto. Con la Honda iba mucho más cómodo y con esta no tanto. Venía acostumbrado de una moto que, detrás de gente, iba mejor, me encontraba mejor y los tiempos bajaban más rápido. Con la Ducati, detrás de otro piloto, pierdes y luego tampoco los llegas a recuperar; y es ahí donde también he visto que los neumáticos se comportan de manera diferente a lo que yo estaba acostumbrado. Son cosas que tengo que ir puliendo", analiza Marc Márquez.
Por eso no quiere que, con su cuarto puesto en Qatar, se lancen las campanas al vuelo. Sobre todo, porque no tiene referencias del circuito de Portimao con la Desmosedici GP23, algo que sí tenía en Lusail por los test previos. "Eso fue lo más difícil en Malasia y en Qatar, esos primeros días donde me costaba un poco. Vamos a ver si soy capaz de conseguir el objetivo de ser capaz de partir ya de inmediato en esa posición de 'Top 10' y conseguir el pase directo a la 'Q2'", añade el piloto catalán.
"Una carrera puntual no es despejar dudas. Yo nunca las he tenido. Como todo el mundo, he tenido preguntas en mi cabeza, pero tampoco se despejan las dudas con una carrera puntual, tienen que pasar cuatro, cinco o seis carreras para ver cómo va todo y, lógicamente, el objetivo es seguir con la dinámica que hicimos en Qatar. Se cometerán errores, claro. En Qatar fue un fin de semana perfecto, sin errores. Pero, si quieres dar ese puntito más, como tiene Pecco, hay que asumir riesgos y ahí es cuando llegan los errores", advierte Marc Márquez.