Sorpresa inesperada en el mundo del motor en cuanto a imagen se refiere. La próxima temporada, tras más de treinta años de relación, Repsol Honda Team ya no se llamará así. Y es que la petrolera española ha anunciado que dejará de asociar su nombre al del fabricante japonés Honda en el Mundial de MotoGP en 2025.
La noticia, adelantada por Motorsport.com, supone un hecho histórico para un equipo que ya ha visto en los últimos años como sus principales pilotos han volado también. El último, el catalán Marc Márquez, ahora en Ducati.
De esta forma, se pone fin al patrocinador más longevo y reconocible del campeonato del mundo de motociclismo. Y es que desde 1995 ha ejercido como tal en un equipo que ha conseguido 17 títulos de pilotos en la categoría reina (6 de Marc Márquez, 5 de Mick Doohan, 3 de Valentino Rossi, 1 de Álex Crivillé, 1 de Nicky Hayden y 1 de Casey Stoner). Actualmente, sus pilotos principales son Luca Marini y Joan Mir.
Mick Doohan y Alex Crivillé fueron los primeros pilotos que lucieron dicha publicidad en las Honda NSR500. Desde entonces, 183 victorias y 455 podios han convertido dicha relación en una auténtica historia de amor que esta misma campaña cumplía tres décadas.
Y el principal motivo de ruptura ha sido, sin duda, la marcha de Marc Márquez a final de 2023. Fue el curso pasado cuando la petrolera renovó ese mismo año hasta final de 2024 con una fórmula de 1+1. Sin embargo, con la salida del de Cervera, ejercieron una cláusula del contrato para disminuir su aportación económica pese a perder presencia en la decoración de la RC213V.
Según afirma dicho medio, la casa japonesa tiene varias ofertas para decorar su prototipo a partir del próximo año, mientras que la petrolera quiere volcarse en la difusión de los combustibles no fósiles.
Así, no se descarta que Repsol siga vinculando su imagen con la de MotoGP en el futuro, pero siendo uno de los proveedores de los nuevos combustibles más sostenibles adoptados por el campeonato.
Cabe recordar que la normativa actual introdujo, para este año, la obligación de emplear un 40% de gasolina no fósil para los equipos de la clase reina, un porcentaje que deberá llegar al 100% en 2027. Una transformación hacia un deporte más sostenible del que Repsol quiere formar parte principal.