Rafa Cala4 min lecturaMarc Márquez está siendo el gran ausente de este inicio del Mundial de MotoGP. El piloto español sólo ha podido completar la Sprint Race del Gran Premio de Portugal puesto que en la carrera larga del domingo, la de toda la vida, cayó lesionado por un accidente que provocó él mismo en el que tiró a Miguel Oliveira. Marc Márquez tuvo que pasar por el quirófano para operarse y así se ha perdido los grandes premios de Argentina, Estados Unidos y España, siendo en este último el gran añorado en el circuito de Jerez en donde dio una actualización de su lesión. El objetivo es volver en el Gran Premio de Francia que se disputará en trazado de Le Mans en dos semanas, pero existen dudas de que el español puede correr.
Ha sido el doctor Roger de Oña, quien operó a Marc Márquez en la Clínica Ruber Internacional de Madrid, quien ha hablado sobre la posibilidad de que el piloto de Honda reciba la luz verde para disputar el Gran Premio de Francia que se disputa el próximo 14 de mayo en el circuito de Le Mans.
"En Le Mans, Marc llevará siete semanas desde la operación. De la misma forma hubiéramos tenido que ver algo excepcional [en las pruebas del martes] para que corriera en Jerez, confiamos en que sí pueda hacerlo en Francia. Si sigue la evolución normal, viendo cómo van las cosas, debería de estar listo", ha afirmado el doctor Roger de Oña en una entrevista concedido a motorsport.com.
El médico explicó también los motivos por los que Marc Márquez no ha acortado los plazos de su recuperación como en otras cosas, puesto que de hacerlo estaba en juego el resto de su carrera deportiva. "La fractura de Marc Márquez se conoce como fractura de Bennett, y es distinta a una diafisaria, que podríamos haber resuelto con tornillos y una placa. En su caso, había un fragmento de hueso muy pequeño que permaneció en su sitio, mientras que el resto del pulgar se desplazó. Por eso necesitamos que el hueso se consolide bien, porque en esa zona se concentran muchas de las fuerzas que genera una moto de MotoGP. Para un deportista que utiliza mucho esa zona, como puede ser un quarterback, un jugador de baloncesto o un piloto, el tiempo de recuperación oscila entre las seis y las ocho semanas. Que Marc pudiera correr solo cuatro semanas después, hubiera sido excepcional. No podíamos asumir el riesgo de que eso se rompiera a final de recta, a 350 por hora, y no pudiera frenar. Si la cirugía arrancara los trozos de hueso, esos pedazos ya no se podrían volver a colocar de la forma más adecuada, de modo que las posibilidades de arrastrar secuelas serían mucho mayores. Y, para rematarlo, la recuperación podría pasar a ser de varios meses. No valía la pena correr ese riesgo", argumentó.