No es ningún secreto que Max Verstappen quiere probar cosas nuevas, especialmente después del gran bajonazo que ha tenido su Red Bull en cuanto a rendimiento en pista. El neerlandés siempre ha tenido un coche con fuerza suficiente como para pelear por los mundiales, lo que le ha permitido tener tres títulos del mundo, pero la situación está cambiando. Ese dominio absoluto de Max y Red Bull está llegando a su fin, y por eso el actual líder de la clasificación busca nuevos equipos.
Se ha especulado mucho sobre la posibilidad de que en un par de años Max sea el compañero de Fernando Alonso en Aston Martin, que está haciendo todo lo posible para convertirse en una escudería capaz de pelear por victorias y por títulos. Para ello han fichado a Adrian Newey, un genio de ingeniería que en cada coche que diseña hace milagros. Por ello podría ser una opción válida para Max, pero todavía poco factible debido al nivel en el que está, un pasito por encima de este proyecto.
Por ello, encuentra un nuevo destino que se asemeja mucho más a sus metas y que sí es una opción muy viable de cara a 2026. Verstappen lleva años compitiendo contra Mercedes, de hecho fue el que cortó su racha ganadora, pero ahora podría empezar a defender los intereses de la escudería alemana. De hecho, ya se están llevando a cabo negociaciones para contemplar este proyecto como interesante para el neerlandés.
Toto Wolff tiene en mente una idea y no va a parar hasta conseguirla. Mercedes, que también ha sufrido un declive en sus resultados, va a atravesar una de sus peores etapas. Después de dominar los circuitos durante casi una década, han perdido casi toda la fuerza ganadora y han caído varios puestos en la clasificación. Por no hablar de que su principal líder y uno de los mejores pilotos de la parrilla, Lewis Hamilton, los deja para poner rumbo a Ferrari.
Por ello el jefe de equipo quiere que Max se una a su proyecto, para volver a la cima de la que él les sacó. Wolff no lo esconde "no ha podido ser, pero seguimos interesados en Max para 2026" dijo el austriaco al confirmar a Antonelli para la próxima temporada. Pero el entorno de Max, Jos Verstappen y Raymond Vermeulen, su padre y su representante respectivamente, cada vez están más convencidos de este cambio. Por ello cada vez tienen más reuniones con Toto, la última en Bakú este pasado fin de semana. Lo que confirma que la marcha de Verstappen a las flechas plateadas es más que posible en 2026.