Alberto Gálvez3 min lecturaEl tetracampeón Max Verstappen lo tiene claro. Este año no será tan fácil revalidar su corona. Y para el primer Gran Premio de 2025 ya da por perdida la primera plaza tras lo visto y analizado en los test oficiales realizados en Bahrein.
En una entrevista realizada por los compañeros de Motorsport.com, el piloto de Red Bull dejó claro qué escudería está, a día de hoy, por encima del resto: "De momento solo uno, y ese equipo es naranja. Por supuesto, es un color muy bonito, pero aún nos queda trabajo por hacer, otros equipos creo que también quieren ver algunas mejoras, así que de momento es una escudería la que está claramente delante".
Cuestionado por la pretemporada, el neerlandés sigue tan exigente con su equipo como siempre: "Trabajo por hacer, si miras los tiempos por vuelta, creo que McLaren es el favorito. Con nosotros, no todo ha ido del todo bien, pero por otro lado tenemos algunas ideas sobre cómo mejorar, también he pasado mucho tiempo en el simulador, por ejemplo ayer con el equipo. No creo que podamos competir por la victoria ya en Melbourne, pero sí espero que podamos hacer algunas mejoras en unas pocas carreras", ha continuado el vigente campeón de F1.
Al igual que su director técnico, Pierre Waché, quien confesó en Barhein su descontento, Max también cree que los resultados no se correspondieron a las expectativas generadas en este invierno: "Nunca es lo suficientemente bueno. Creo que nosotros mismos quizá esperábamos un poco más en Bahrein, aunque después de las pruebas tienes más tiempo para revisar los datos, entonces, sacas ciertas conclusiones. Creo que todo podría estar un poco más reñido en Australia que en Bahrein, pero como he dicho, creo que todavía tenemos algunas cosas que mejorar".
Por último y ahondando en la materia de su monoplaza, Verstappen ha sido contundente con el resultado de su nuevo coche: "En términos de equilibrio, sí que se nota un poco mejor ahora al entrar en las curvas y en medio de la curva, pero por otro lado, sigue habiendo problemas con los bordillos y con los baches. Obviamente, esas cosas no son nuestros puntos fuertes y sigo insistiendo en ello. No siempre hay que decirlo al mundo exterior, pero durante las reuniones, hablamos mucho de eso". Y antes de cerrar su entrevista ha reconocido que el subviraje comenzaba siendo otra asignatura pendiente: "Eso también podría ser mejor".