Fernando Alonso siempre ha sido incómodo para la Fórmula 1 y, según muchos, por eso no tiene más títulos ni más victorias de las que atesora. Y por eso mismo, algunas escuderías, para no enfrentarse con la cúpula, también lo dejaron de lado en alguna ocasión a lo largo de su carrera.
Su último enfrentamiento ha llegado por los Sprints y por el masificado calendario. Ya el pasado año criticó el modelo de fin de semana que había en los grandes premios donde había carrera corta. Y la F1 lo cambió para hacerlo más acorde a las peticiones de los corredores. Pero tras la primera carrera al sprint en China y la sanción que recibió por su lucha con Carlos Sainz -que se une a la insólita que ya le habían asignado en Melbourne-, el piloto español ya no se ha contenido.
Fue más allá. Criticó los sprints, dijo que no servían para nada ni daban espectáculo -porque si se luchaba, te sancionaban- y aseguró que no merecía la pena disputarlos. Y lo hizo realidad en Miami. Cierto que tuvo un percance en la primera vuelta que le condicionó, pero se tiró toda la carrera probando la degradación de los neumáticos. El problema es que el que provocó ese percance, Lewis Hamilton, no fue sancionado por ello y eso molestó aún más al ovetense.
"Supongo que no decidirán nada, porque no es español", señaló antes incluso de saber que el británico iba a salir de rositas. Curiosamente, los comisarios de carrera le 'darían la razón' al día siguiente al sancionar a Carlos Sainz por algo por lo que no habían sancionado a Oscar Piastri.
Fernando Alonso parece decidido a acabar con este problema y se reunió este domingo con el presidente de la FIA, Mohammed ben Sulayem. Todo hacía indicar que era para quejarse de estos agravios comparativos.
El piloto español acabó muy satisfecho de esa reunión y, en declaraciones a Motosport, señaló que Ben Sulayem tenía pensados unos cambios que mejorarían la categoría. "Hablé con él y siempre está de acuerdo con todas las opiniones que tienen los pilotos. Sabe que somos nosotros los que conducimos los coches y los que podemos tener algunas sugerencias sobre las cosas. Hay un par de temas que tenemos que abordar como categoría. Pero siempre nos ha escuchado. Vamos a ver si hacemos de la F1 un deporte mejor y un poco más consistente", añadió.
En este sentido, este medio entiende que lo que la FIA busca es que haya más claridad en todo lo que concierne al arbitraje de las carreras y busca "elaborar un documento que abarcará todos los aspectos" de las mismas, "incluidos los adelantamientos, las defensas y los límites de la pista". Algo que ahora varía según quien esté de comisario de carrera o, como dijo Alonso, según la nacionalidad del piloto al que deban sancionar. Habrá que ver, en la lucha que hay por el poder entre FIA y F1, cómo acaba todo este asunto, pero Ben Sulayem está decidido a que acaben las críticas por algo que deja en mal lugar y desprestigia a la Fórmula 1.