Alemania lanza un desafío a la Unión Europea con la venta de los combustibles sintéticos

La subida del precio de las materias primas dificulta el paso hacia la movilidad sostenible en el mercado europeo

Alemania lanza un desafío a la Unión Europea con la venta de los combustibles sintéticos
Bosch es uno de los proveedores que confirman la necesidad de usar combustibles sintéticos - Motor.es
Iván DíazIván Díaz 4 min lectura

Uno de los países que más se entregaron en la lucha por la supervivencia de los combustibles sintéticos es Alemania. El territorio germano, de la mano de Porsche, invirtió de forma considerable en los aspectos tecnológicos para garantizar la viabilidad del motor de combustión térmica, al que la Unión Europea le puso como fecha de caducidad el próximo año 2035. Con esta decisión, Alemania lanza un verdadero desafío a esta comunidad política.

Gracias al apoyo que ofrece el gobierno federal alemán, marcas como Porsche ven favorecida la defensa de los combustibles sintéticos. En este sentido, la marca realizó grandes inversiones para el fomento de la investigación y el desarrollo de esta tecnología, con el objetivo principal de favorecer la viabilidad de los motores de combustión térmica. De hecho, los primeros estudios que realizó el fabricante de automóviles alemán especializado en vehículos deportivos de lujo, vieron el logro de una importante financiación que les permitió profundizar aún más en los e-fuels.

Además de algunas marcas como Porsche, institutos y universidades de ingeniería de prestigio también se prestaron a continuar con las inversiones y las investigaciones. En contra se muestra la Unión Europea, quien no concibe aceptar este combustible en el plan de cambio de movilidad propuesto para el año 2035. Así, para entonces en Europa tan solo tendrán cabida los coches eléctricos que funcionen con batería o los vehículos de hidrógeno. A día de hoy, esta tecnología se presenta inviable económicamente para establecerlo como mercado de masas. Si bien, Porsche trató de demostrar que los distintos combustibles sintéticos podrían ser utilizados en coches nuevos.

El desafío al que Bruselas tendrá que hacer frente

Alemania sopesó que era el momento adecuado para forzar la situación con la Unión Europea. De hecho, decidió permitir la venta al público de combustibles artificiales en cada una de las distintas estaciones de servicio, algo que no estaba permitido por la Ordenanza Federal de Control de Emisiones. Si bien, el gobierno federal pactó una enmienda que permitirá a las gasolineras de Alemania la venta de combustibles 100% sintéticos.

Ahora es el turno de ver la respuesta que la decisión acarrea en el consumidor. De darse, la Unión Europea podría replantearse la inclusión de combustibles sintéticos en su nuevo plan de movilidad sostenible, así como la suspensión de la fecha de caducidad establecida en 2035.

Un combustible polivalente

La ciudadanía europea se ve afectada por la subida de los precios de las materias primas que utilizan los fabricantes de coches eléctricos, algo que dificulta la llegada a todos los segmentos del mercado automovilístico. Por ello, Europa tendrá que resolver este dilema y garantizar el acceso a todo el público si quiere dar ese paso hacia la movilidad sostenible.