Aitor Torvisco6 min lecturaEl Sevilla FC se impuso en la sobremesa del domingo al Rayo Vallecano con el exiguo marcador de 1-0, un marcador demasiado corto para haber jugado durante 50 minutos con un futbolista más pero un premio muy valioso, ya que el cuadro madrileño generó nervios rozando el empate tras gozar de las ocasiones más claras de la segunda mitad. La imagen del equipo nervionense volvió a ser mala, el juego sigue dejando mucho que desear, la capacidad de pegada sigue siendo nula, el sufrimiento es perenne... pero el triunfo sirvió para cortar una racha de dos derrotas seguidas y sin ver portería después de encadenar un 0-2 en casa ante la Real Sociedad y un nefasto 1-0 contra el CD Leganés acumulando dos tiros a puerta en esos 180 minutos. Ahora, toca semana de competición continental y, además los de García Pimienta cerrarán la jornada 15 el próximo lunes, motivos por los que el técnico ha decidido conceder un premio a su vestuario en forma de dos días libres (casi tres) para que descanse, desconecte y libere presiones... mientras cruza los dedos por Dodi Lukébakio.
Aunque el equipo nervionense sigue en la mitad baja de la clasificación, decimosegundo, estos tres puntos sirven a los nervionenses para colocarse a sólo tres de la zona europea y ampliar hasta las ocho unidades su colchón con respecto a los puestos de descenso. Evidentemente, son datos dignos de ser valorados, especialmente teniendo en cuenta que las capacidades demostradas por este Sevilla FC siguen siendo muy limitadas. La afición volvió a irse decepcionada, llegó a pitar con el disparo al palo del rayista Álvaro García, en la más clara de las cuatro ocasiones que dispusieron los visitantes para haber rascado un empate jugando con 10 desde antes del descanso por la roja directa a Unai López por una leve agresión a Isaac Romero captada por las cámaras del VAR.
Con este siempre agitado contexto, la plantilla sevillista ha acudido en la mañana de este lunes a la Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros Palacios para realizar una sesión de recuperación, con trabajo de descarga para los futbolistas que acumularon más minutos ante el Rayo Vallecano y con una suave sesión para el resto de los integrantes del plantel. García Pimienta recuperó para el encuentro de este fin de semana a tres jugadores que han arrastrado diversas molestias en las últimas semanas, casos de Loïc Badé y José Ángel Carmona, titulares ambos, además de Suso Fernández, que salió en el tramo final. También entró en la lista Saúl Ñíguez, pero el míster catalán explicó que sólo se debió a las ganas que tenía el mediocentro de volver a la dinámica grupal tras pasar dos meses de baja y se quedó en el banquillo sabiendo de antemano que no iba a jugar.
La idea es que Saúl se pruebe unos minutos en el duelo del próximo lunes 2 de diciembre ante CA Osasuna, en el choque que cerrará la jornada 15 en Primera división y que se disputará nuevamente en el Ramón Sánchez-Pizjuán. Ahora mismo, el jugador que acapara miradas es Dodi Lukébakio, quien volvió tocado de la concentración con la selección de Bélgica y tuvo que ser sustituido ante el Rayo para evitar una lesión, tal y como explicó en rueda de prensa el propio Pimienta, quien confió en que el atacante pueda llegar a tiempo para el próximo encuentro y se mostró optimista ante la confianza que cree que ganará la plantilla tras salir vivo de una innecesaria situación de sufrimiento ante un rival con uno menos.
En este inicio de una nueva semana de competición, el resto de la enfermería del Sevilla FC sigue sin novedades: Orjan Nylan e Idumbo Muzambo son los dos convalencientes que más cerca están de volver a trabajar con el grupo, mientras que a Chidera Ejuke aún le quedan al menos un mes y a Tanguy Nianzou no se le espera hasta febrero de 2025. Tampoco está disponible el canterano Isra Domínguez, que venía contando para Pimienta y no ha podido esquivar el quirófano. En medio de esta situación, el cuadro blanquirrojo gozará de descanso el martes y el miércoles, así que regresará al trabajo el próximo jueves a partir de las 10:30, mismo horario en el que se ejercitará viernes, sábado y domingo, antes de recibir a Osasuna el lunes en Nervión. A por otro regalito navideño. A ser posible, menos sufrido.