Corren malos tiempos en Nervión. El Sevilla FC no consigue adquirir la velocidad de crucero suficiente para dejar atrás los puestos de descenso, de nuevo su hábitat tras el triunfo del Espanyol en Getafe. Es más: si el Cádiz no pierde frente al colista y casi desahuciado Elche, los blanquirrojos, que cayeron sobre la bocina en Girona, serán penúltimos de la clasificación. El grave error de Nianzou ante Valéry que permitió el 2-1 de Yangel Herrera ha sido la gota que colma el vaso de la paciencia de muchos en el Ramón Sánchez-Pizjuán. También fuera de la 'Bombonera', como demuestra la tensión en el recibimiento al equipo en el Aeropuerto de San Pablo. Una incomodidad verbalizada siempre por Jorge Sampaoli, a quien le costaba ser optimista en la sala de prensa de Montilivi y que comparecía este domingo cabizbajo y meditabundo en el primer entrenamiento para preparar el duelo copero del martes ante el Alavés. Un indicio, quizás, de que ni siquiera su puesto está asegurado en estos momentos.
Empiezan a escucharse, de hecho, las primeras voces contrarias a la continuidad del argentino, que ha firmado un 10 de 30 en LaLiga que no da para respirar en la tabla, por mucho que cuente con el beneplácito del grueso del plantel, que piensa en aspirar todavía a Europa cuando sigue con el agua al cuello. Se esperaba continuidad al apurado 2-1 del fin de semana anterior contra los azulones, pero en los despachos de Eduardo Dato se habla ya abiertamente del error de planteamiento en tierras catalanas, considerando al rival quizás mejor de lo que era, y el tiempo perdido defendiendo el 0-1 sin buscar la meta contraria, así como la obcecación del ex seleccionador chileno y albiceleste en elaborar jugadas desde atrás, considerando a Bono un líbero más que un portero, pese a que Badé acaba de llegar, Nianzou arriesga demasiado y algunos acusan en las piernas la presión. El consejo de administración tiene previsto reunirse esta semana, casi con toda seguridad este lunes, aunque no hay planteamiento de fijar un ultimátum como tal ni mucho menos debatir el despido del entrenador.
Sí hay quien pondría ya sobre la mesa la situación, incluso aunque se siga cumpliendo en la Copa del Rey, con todas las miradas en el duelo del próximo sábado en Nervión ante un rival directísimo por la salvación como el Cádiz. Dependiendo de la fuente consultada, se especula con la influencia de la opinión de José María del Nido Benavente, aspirante cada vez más firme a recuperar la presidencia del club. Y, en cualquier caso, del deseo de José Castro y otros accionistas de peso acerca de un nuevo pacto para la gobernabilidad que incluya cierto consenso en determinadas decisiones. Estas filtraciones sentencian que el propio Monchi nunca estuvo convencido al cien por cien de que Sampaoli fuese el relevo idóneo para Lopetegui, por lo que, indirectamente (léase, utilizando otros intermediarios), sería conocedor de una llamada a José Bordalás para conocer sus pretensiones y su disponibilidad inmediata.
Desde la planta noble del Sánchez-Pizjuán niegan rotundamente a ESTADIO Deportivo cualquier debate sobre la continuidad del míster o discrepancia de éste con el director general deportivo, "centrado en conseguir los refuerzos invernales que consoliden un plantel al alza, digan lo que digan los resultados", añaden. Consultado también el círculo más cercano al preparador argentino, el de Casilda es ajeno a los rumores crecientes sobre su cargo, aunque no a los nombres de posibles sustitutos que empiezan a conocerse. En su descargo, refieren que "es la primera derrota en partido oficial o amistoso desde hace dos meses, cuando se cayó ante la Real Sociedad justo antes del parón mundialista", amén de llegar de manera coyuntural, tras "un error individual ridículo" y no como consecuencia de fallos generales de concepto. Por el contrario, se asegura que Sampaoli "va a seguir trabajando para sacar el equipo adelante", incluso a pesar de que, de los siete fichajes invernales prometidos, sólo llegó uno, sin perspectiva de que se alcance siquiera la mitad de esa cifra. Especialmente urgente resulta un delantero de otro perfil diferente a Rafa Mir y En-Nesyri, con gol y regate.