La rabia y celebración de Ocampos tras eliminar al PSV en su vuelta a Países Bajos

El Sevilla tan sólo sufrió en los últimos minutos del choque de vuelta ante el PSV pero el viaje a Eindhoven dio para mucho más, para varios reencuentros y para una 'revancha' particular que tenía Ocampos...

Fernando RuizFernando Ruiz 3 min lectura

El Sevilla Fútbol Club regresó el pasado miércoles, 17 años después, a Eindhoven para disputar el jueves el partido de vuelta del play off de la Europa League y con el club hispalense viajó el excapitán Javi Navarro, quien levantó al cielo de la ciudad neerlandesa el primer título de la UEFA de la historia del club y que un año después lo volvería a repetir en Glasgow. Durante el viaje, el exsevillista departió con varios de los jugadores del actual equipo, entre ellos el capitán Jesús Navas, el único superviviente de la actual plantilla que disputó aquella final de la UEFA.

En el reportaje realizado por el Sevilla se puede ver como Javi Navarro recuerda aquella ocasión pisando el césped del Philips Stadium, aunque también pudimos ver cómo fueron las horas previas al partido, donde la afición sevillista no paró de animar en las calles de Eindhoven hasta la hora del partido.

Las imágenes mostradas por el club nos dan dejado como siempre muchos más detalles, como la charla y el saludo entre Fabio Silva y Rafa Mir, rivales en esta eliminatoria pero que compartieron vestuario en el Wolverhampton. También, como no, los muchos saludos de De Jong con buena parte de la plantilla sevillista con la que saboreó la conquista de la sexta Europa League en Colonia.

Pero esta vez sólo podía quedar uno, y ese fue el Sevilla Fútbol Club, pese a la derrota 2-0, haciendo así buena la renta de tres goles cosechada en la ida. Y es que el partido tuvo de todo, lanzamiento de objetos a Acuña, una agresión a Dmitrovic por parte de un aficionado rival que saltó al campo y emoción hasta el final con el segundo gol en los últimos segundos del PSV.

Pero no hubo tiempo para más, protestaron los jugadores neerlandeses que querían más tiempo añadido y celebraban los sevillistas, especialmente un Lucas Ocampos que se tomó esta vuelta a Países Bajos como una revancha personal después de su aventura para olvidar en el Ajax. Lo festejó con rabia el argentino, descargando toda la tensión del encuentro ante la grada rival que estuvo durante todo el partido provocándole por su pasado en el conjunto de Ámsterdam. Todo lo contrario a Luuk de Jong. El exfutbolista del Sevilla no dudó en felicitar a los que fueran sus compañeros tras el partido.

También en el vestuario se descargó toda la tensión, con evidente cansancio, pero donde la voz de Rakitic predominaba sobre el resto. "Nosotros pasamos, quedaron ellos, hemos pasado. Seguimos en el camino", gritaba el capitán nervionense.