El Sevilla FC ha elegido a Quique Sánchez Flores como su nuevo entrenador, aunque lleva todo el domingo tratando de convencerle, a través de su agente, para que acepte firmar únicamente hasta final de la presente temporada, pues el madrileño, en paro desde que abandonara el abril de 2023 el Getafe CF, pide un segundo año de vinculación que, como poco, se pueda ganar con resultados. Al cierre de esta edición se había alcanzado un principio de acuerdo para que el experimentado preparador de 58 años sea el relevo de Diego Alonso, que recogía sus pertenencias en la Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros Palacios y se despedía de los empleados que le faltaban por saludar, dejando el entrenamiento vespertino de recuperación en manos de uno de sus ayudantes, impuesto por el club como a José Luis Mendilibar: Juan Díaz Quinta, Juanito.
Si no hay giros de última hora, Quique se trasladará en las próximas horas desde su residencia en la capital de España hacia la hispalense para firmar su contrato e, incluso, ser presentado ante los medios de comunicación, lo que debería ocurrir después de la única sesión de que dispondrá, a partir de las 18:30 horas en la Carretera de Utrera, para preparar la trascendental visita del próximo martes a las 21:30 horas al Granada CF, penúltimo de una clasificación que preocupa y ocupa a los responsables nervionenses. Y es que, tras el triunfo esta jornada del RC Celta ante los nazaríes y el empate del Cádiz CF ante la UD Las Palmas, el conjunto de 'La Bombonera' ha sido superado por los amarillos (14 puntos) y empata a 13 unidades con los celestes, marcando la frontera con el descenso y salvándose momentáneamente de caer merced al 'goal-average' general, pues el particular está igualado tras el polémico 1-1 en Balaídos.
Desde ESPN se añadía este domingo que el acuerdo económico estaba encauzado y que, entre los colaboradores que le acompañarán a Sánchez Flores en su nueva aventura, estará el valenciano José Luis Oltra, que recientemente ha dejado de pertenecer al AEK Larnaca chipriota. Al parecer, Quique se ha ido quedando solo en un casting que comenzó siendo de cuatro nombres, con Manolo Jiménez como alternativa de la casa, aunque tendría que desvincularse del Cerro Porteño paraguayo, donde ejerce de asesor deportivo. Víctor Orta volvió a tantear a Javi Gracia, con el que ya contó en su etapa final en el Leeds United, pero el navarro sigue en sus trece de no dirigir a ningún club de momento. Con el de Arahal no llegó a haber contactos, sino que simplemente se apuntó su nombre por delante de Joaquín Caparrós, mientras que Diego Martínez, otro de los que gustaba, necesita resolver antes su finiquito con el Olympiacos griego y todavía no le conviene entrenar.
Éstas son las versiones oficiales y diplomáticas, pues, según confirman a ESTADIO Deportivo, dos de los ya mencionados, además de un preparador suramericano a quien el director deportivo sondeó sin suerte (del que solamente se conoce que jugó en España, pero nunca se sentó en un banquillo de Primera o Segunda, como le ocurría a Diego Alonso) rechazaron la baja propuesta monetaria y la exigencia sevillista de comprometerse únicamente hasta el 30 de junio de 2024. El madrileño habría conseguido, finalmente, que José Castro y José María del Nido Carrasco incluyan en el contrato que, de alcanzar según qué objetivos deportivos (unas fuentes hablan de la mera permanencia, otras competiciones europeas y hay quien defiende que se terminará redactando que respirar con una anticipación suficiente tendría premio), su permanencia se prorrogue otra campaña.