Si todo marcha según lo previsto, Quique Sánchez Flores podría tener 'overbooking' a la hora de confeccionar una lista de convocados muy pronto, de tal manera que Rafa Mir no sea el único descarte por decisión técnica. No cesan las buenas noticias desde la enfermería, que ha tenido en los últimos meses una media de ocupación de las más altas de LaLiga, hasta el punto de que, si ya regresaron en Almería Marcao, Lamela, Acuña, Gudelj y Lukébakio, los tres últimos con minutos bien aprovechados en la segunda parte, durante esta semana se espera a la mayoría de los cuatro lesionados que quedan, si bien lo más lógico es que ninguno fuerce (no hace falta) para llegar al duelo del domingo (14:00 horas) en el Ramón Sánchez-Pizjuán ante el RC Celta, aprovechando el inminente parón de selecciones para llegar rodados y con ritmo a la vista del Sábado Santo (a las dos de la tarde) al Coliseum de Getafe.
Este martes, jornada de descanso para la plantilla nervionense tras la cita liguera del lunes por la noche en el Power Horse Stadium, trabajaron 'motu proprio' en la Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros Palacios los aún renqueantes Joan Jordán, Lucien Agoumé y Mariano Díaz, así como otros que no tuvieron participación alguna contra el colista de Primera división, caso de Hannibal Mejbri. El catalán, el franco-camerunés y el hispano-dominicano se irán sumando al grupo en los próximos días, por lo que el único que restaría por dar ese paso es Juanlu Sánchez, con una elongación en el isquiotibial izquierdo más reciente que aconseja ir con algo más de cautela. Sin embargo, las dolencias musculares de los dos pivotes, así como la tendinosa del delantero han evolucionado satisfactoriamente, así que todos ellos deben dar el paso muy pronto.
El que no se perderá el duelo contra los vigueses, que estrenarán entrenador en Nervión, es Suso Fernández. Pese a que la realización de Movistar Plus LaLiga le adjudicó una tarjeta amarilla por protestar tras el 2-2 de la UD Almería, lo que le obligaría a cumplir ciclo de amonestaciones, el acta de De Burgos Bengoetxea no la recoge, por lo que el extremo, como Jesús Navas, seguirán apercibidos, pero, de no sufrir ninguna contingencia (el palaciego aguantó una hora en este jornada 28ª, pese al esguince en el tobillo izquierdo que sufrió ante la Real Sociedad), podrán ser alineados este fin de semana. Y, si ninguno de los dos mete la pata (léase, ve una amonestación) y ellos o algún otro en blanquirrojo es expulsado, lo nunca visto llegaría tras el parón: todos (los 28) disponibles para Quique, que tendría que dejar a cinco sin vestir obligatoriamente en Getafe.