Iván Díaz3 min lecturaNuevo episodio en la planta noble del Sevilla Fútbol Club. Este lunes tuvo lugar la Junta de Accionistas anual de la entidad. En los sótanos del Hotel Meliá Los Lebreros, los máximos mandatarios de la entidad, así como diversos accionistas de peso, como José María del Nido Benavente, quien tuvo un rifirrafe con el actual presidente, José Castro Carmona, y representantes del sevillismo, se dieron cita para debatir, entre otras cosas, acerca de la gestión del club durante la temporada 2022/23. Una gestión que, de forma oficial, ha sido rechazada en la Junta de Accionistas.
Dictaba el punto séptimo el examen y, en su caso, la aprobación de la gestión del Consejo de Administración en el ejercicio que concluyó durante el pasado 30 de junio de 2023. Esta fue rechazado con un total de 56’99% de votos en contra, por un 41’24% votos a favor. Tampoco lo fueron los puntos seis, ocho y nueve donde se evaluaban las Cuentas Anuales, el Estado de Información no Financiera y la Distribución de resultado del ejercicio finalizado.
En cuanto a los presupuestos, el coste de la plantilla actual se marchó hasta los 193 millones de euros, donde el resto de gastos se marchó hasta los 83 millones de euros, dejando un resultado negativo de 21’9 millones de euros con impuestos. En este sentido, Cruz destacó que, "comparando con el ejercicio anterior, aun siendo ambos negativos, son 6 millones de menos pérdidas con respecto al ejercicio anterior, pero pérdidas al fin y al cabo".
Para más inri, tal y como ya desglosamos en ESTADIO Deportivo, el presupuesto del Sevilla FC para la 23/24 esconde un nuevo y verdadero peligro. De esta manera, el conjunto rojiblanco tiene presupuestado para el presente curso acabar cuarto en LaLiga y clasificarse para los octavos de final de la Champions. Por lo pronto, el objetivo liguero lo tiene a 18 puntos a estas alturas de la temporada, mientras que en Liga de Campeones ya tiene imposible acceder a la siguiente ronda.
Sin duda, la situación económica del club podría presentar grandes problemas en un futuro no muy lejano. De este modo, podría verse obligado a hacer ventas importantes y rebajar la masa salarial de su plantilla. Según los cálculos, a priori, ni ganar la Europa League ni vender a jugadores de alto caché como Youssef En-Nesyri salvarían la papeleta. Por lo pronto, la afición está muy caldeada tal y como se vio antes de la Junta de Accionistas con la manifestación de los Biris Norte. Hay para rato.