Las medias rojas, las caras largas y los reencuentros en el Camp Nou

La derrota en el Camp Nou ha supuesto un freno a la ilusión sevillista, pues no por esperada dejar de tener un efecto negativo en un equipo que venía en clara ascendencia y que había sumado 10 puntos de 15 posibles desde la reanudación de la competición tras el Mundial de Qatar. Los más supersticiosos señalarán a las medias rojas y su maleficio como parte responsable de la derrota. Estos defienden que jugar con las medias de la segunda equipación y de la camiseta y calzonas de la primera no trae buenos resultados, curiosamente así jugó en el partido de Copa ante Osasuna donde cayó eliminado.

Pero más allá de la superstición, el Sevilla renunció a su estilo de juego que venía desarrollando en las últimas jornadas. Un estilo ofensivo, queriendo tener el balón y jugando en campo rival, algo que en ningún momento pudo hacer ante un FC Barcelona mucho más superior. Así lo admitió Jorge Sampaoli tras el partido pero las caras de sus futbolistas no podían esconder la decepción por el 3-0 encajado.

Así se pueden ver en el reportaje mostrado por los medios oficiales del club nervionense, los jugadores volvía al vestuarios con caras largas y cabizbajos, alguno incluso no pudiendo ocultar su enfado como Gudelj. Detalles estos como muchos otros antes del partido en las escasas horas que el Sevilla estuvo en Barcelona.

Desde la llegada al hotel de concentración donde esperaban un buen números de aficionados sevillistas, con los que los jugadores no dudaron en pararse a fotografiarse y firmar algunos autógrafos. Ivan Rakitic fue uno de los más aclamados, posiblemente también por su pasado azulgrana. También Ocampos, Acuña, Bono o En-Nesyri departieron con los aficionados.

Cosa que también hizo el propio Monchi una vez ya dentro del Camp Nou, que no dudó en fotografiarse con algunos aficionados que así se lo pidieron. También hubo momento para el reencuentro, como el de Jules Koundé con sus excompañeros, a quien se le pudo ver abrazándose a Rekik en el túnel de vestuarios antes del partido, como así lo hizo también Rakitic con Sergio Busquets.

Ahora toca recomponerse, intentar recuperar la versión de partidos atrás para volver a las senda del triunfo, esa que han encontrado en los tres últimos partidos de LaLiga en el Ramón Sánchez-Pizjuán y que les ha permitido coger algo de aire, pero los rivales de abajo no fallan y el descenso sigue a tan sólo dos puntos de distancia. Próximo rival, el Mallorca.