Joaquín Sánchez volvía a ser líder de audiencia este jueves con su serie documental 'La penúltima y me voy'. El capitán del Real Betis, que en el anterior 'capítulo' habló de su boda y de todo lo que aconteció en torno a ella, se centró en este programa en los que es el Real Betis para él y, entre los muchos temas que tocó, también lo hizo en el espinoso partido jugado en enero de 2022 en el Benito Villamarín ante el Sevilla FC y que ya ha pasado a la historia como "el derbi del palo".
Mucho se ha hablado de ese partido, de la suspensión, del desvanecimiento de Joan Jordán, de la potencia con la que la vara de la bandera pudo golpear al jugador catalán, sobre el triunfo final verdiblanco o sobre las consecuencias posteriores, en las que el Betis se libró con una multa cuando lo amenazaban con un cierre parcial del Benito Villamarín.
Tras el choque, sólo se supo la versión oficial del club verdiblanco, ya que los jugadores béticos pasaron página, pero Joaquín, que no pudo jugar ese partido y tuvo que verlo desde la grada quiso dar una visión en la que se moja al respecto y señala a Joan Jordán.
"El partido tendría que haberse reanudado porque el futbolista estaba bien. Eso no se puede permitir, es muy triste. Actuar así es muy triste. El único perjudicado fue el fútbol y la afición”, asegura el capitán bético, quien cree, como muchos béticos siguen denunciando, que el jugador catalán se 'mareó' a petición de Julen Lopetegui. El partido se suspendería provisionalmente y se reanudaría al día siguiente sin público... y sin Joan Jordán, que tuvo que acudir al hospital y estar 24 horas en reposo por precaución.
“Cada uno sabrá si detrás hay algo más o no. Lo que está claro es que nosotros queríamos seguir jugando”, añade Borja Iglesias en el programa, otro de los jugadores que dio su opinión. También lo haría Andrés Guardado, quien después se vería envuelto en una polémica por, supuestamente, imitar la caída de Joan Jordán. "El equipo estaba enfadado, muy frustrado de saber que lo que estaba pasando era más por una situación fingida que la agresión en sí", afirma el mexicano.
Manuel Pellegrini, por su parte, definió el hecho como "absolutamente repudiable". Sin embargo, tampoco cree que tuviera "las consecuencias por suerte como para haber terminado el partido de esa manera". "Ya está el tema cerrado así que no quiero seguir dándole vueltas", indicaba el técnico del Real Betis.
Ha pasado más de un año desde aquel partido, se han jugado otros dos derbis, pero, como se puede apreciar, esa herida aún no está cerrada. Y eso que el Betis fue el que ganó...