Hace dos veranos, ya con Víctor Orta al frente, el Sevilla tomó la decisión de traspasar a dos jóvenes valores de la cantera al Levante, el mediapunta Carlos Álvarez y el delantero Iván Romero. En ambos casos, como anunció la propia entidad a través de sus medios, el club blanquirrojo se reservó un elevado porcentaje de una futura venta para asegurarse un picotazo económico si los futbolistas explotaban en el Ciutat de Valencia.
Calos Álvarez está rindiendo a un nivel espectacular y en Nervión se frotan las manos de cara a futuras ventanas, pues su valor de mercado se ha multiplicado y ya hay varios clubes que han llamado a su puerta. Su proyección como granota ha resultado más exuberante que la de su compañero en la cantera sevillista, dos años mayor, pero el punta de 23 años, en su momento una de las sensaciones de los escalafones inferiores por su pegada, empieza a despuntar tras un curso pasado lastrado por las lesiones.
De este modo, el ariete de La Solana ha encadenado dos titularidades consecutivas tras entrar al campo en el 39 en la jornada 9 y se destapó este jueves en el partido contra el Deportivo, en el que fue determinante para poner fin a la racha negativa de los levantinistas al marcar los dos goles de su equipo. Así, vio portería en el minuto 7 y 28 y sumó su tercera diana en esta campaña, pues se estrenó ante el Eibar en la jornada 3.
Cabe destacar que Iván Romero se hizo con un sitio en el equipo solo hace dos jornadas y que en su segunda titularidad ha dado un golpe en la mesa con su primer doblete como granota, lo que le puede consolidar como titular para el técnico Julián Calero, sin duda una buena noticia para los intereses nervionenses.
El delantero de origen manchego firmó grandes números en el filial sevillista, con 17 goles y cuatro asistencias en 49 partidos y llegó a lucir la elástica del primer equipo en hasta 11 encuentros. No obstante, no consiguió consagrarse en Primera y se marchó cedido en 2022 al Tenerife, donde marcó cinco goles y sirvió cinco asistencias. Volvió en verano y firmó hasta 2026 con el Levante tras el acuerdo pactado con los nervionenses, que se reservaron "un buen porcentaje en el futuro traspaso, además de beneficiosos variables", como explicó por entonces la propia entidad de Eduardo Dato, En su momento se habló de un 40% de una hipotética venta.