El inaceptable gesto de un aficionado del Rayo Vallecano que hizo estallar a Ocampos

Cuando el argentino se preparaba para sacar de banda, la cercanía de la grada de Vallecas permitió que un chaval le molestase de una forma poco ortodoxa

El inaceptable gesto de un aficionado del Rayo Vallecano que hizo estallar a Ocampos
El hoy carrilero se encara con el culpable del incidente. - CORDON PRESS
Villa GómezVilla Gómez3 min lectura

Quedará, al final, en una mera anécdota, aunque no para Lucas Ocampos. Demasiado templado estuvo el argentino cuando, cumplida la media hora de juego y con 1-1 en el marcador, un aficionado local se molestó en un saque de banda de una manera, vamos a decirlo así, poco ortodoxa. El este lunes carrilero zurdo se revolvió enseguida para afear el gesto al infractor, que contuvo la risa ante la inminencia, segura de tratarse de otro profesional con menos mano izquierda, de un sopapo. Disimulaba junto a su compañero de grada, en Vallecas muy próxima al terreno de juego, el joven hincha local, haciendo como que comía palomitas, aunque hasta Isi Palazón tuvo que acudir para decirle que eso no se podía repetir. El colegiado del Rayo - Sevilla FC, Hernández Maeso, advertía al delegado de campo para que tomara cartas en el asunto, amagando éste con una reubicación del chaval, si bien la gran entrada dejaba pocos huecos libres.

En un principio, parecía que el susodicho agarraba por detrás a Ocampos para impedir que sacase con las manos, aunque las repeticiones demostraron que la cosa fue peor. De esta forma, el aficionado introdujo un dedo en el ano del atacante de Quilmes. Un detalle inaceptable e impropio de un evento de estas características. Al menos, no consiguió que se desconcentrase el sevillista, muy activo tanto en ataque (Dimitrievski impidió con una buena estirada que marcase con un derechazo desde la frontal) como en defensa (se lanzó al suelo para bloquear el latigazo de Balliu, que se preparaba para apuntillar en el segundo palo una penetración por la izquierda del Rayo). El '5' se asoció bien con Acuña en ese perfil y combinó igualmente por dentro con Isaac Romero y En-Nesyri, que volvieron literalmente loca a la zaga del conjunto de Francisco.

Con cuatro goles y dos asistencias en 31 partidos oficiales, Ocampos acumulaba 2.452 minutos hasta el inicio de esta jornada, siendo indiscutible tanto para José Luis Mendilibar como para sus sucesores en el banquillo blanquirrojo, Diego Alonso y Quique Sánchez Flores. De hecho, solamente se perdió la 'final' de Lens en la despedida de la Champions League por su controvertida doble amarilla contra el PSV, además de quedarse en el banquillo en LaLiga ante la UD Almería y descansar en el arranque en la Copa del Rey ante el CD Quintanar. Líder indiscutible del vestuario sevillista, fue curiosa la imagen, nada más volver de vestuarios tras el descanso, en la que Lucas llamaba a En-Nesyri para la piña de grupo al percatarse, tras contar a sus compañeros, que sólo eran inicialmente diez.