Fernando Reges perdió los papeles en el tramo final del encuentro jugado este domingo en el Sánchez-Pizjuán y el Sevilla, corto de futbolistas que pueden jugar en el centro de la defensa, podría pagarlo caro en los próximos partidos. A tenor de la redacción del acta arbitral, al futbolista brasileño podría caerle un duro castigo y hacer que se perdiera un tramo importante de la temporada, con citas claves en LaLiga y en Europa.
Según escribió el colegiado Pulido Santana, Fernando insultó primero al asistente, al que habría llamado "cabrón, cabrón, hijo de puta, cabrón" y, luego, al propio árbitro canario cuando vio la roja, al que dijo: "Hijo de puta, eres un hijo de puta".
Ya más en frío, Fernando reconocía su error y, aunque eso no le va a librar del castigo, sí al menos ha querido pedir disculpas a todos por su comportamiento, impropio de alguien que ha sido siempre un ejemplo para sus compañeros y aficionados. En este sentido, el ex del Manchester City publicaba en su perfil de Instagram una 'storie' en la que mostraba su arrepentimiento.
"Ayer fui expulsado justamente con una roja directa por primera vez desde que juego para el Sevilla FC. Me equivoqué, víctima de los nervios y la tensión del momento, pero ni siquiera la impotencia que sentía justifica mi comportamiento. Quiero pedir mi más sincera disculpa al colegiado Juan Luis Pulido Santana y al resto de miembros de su equipo por mis improcedentes palabras, que para nada representan el profundo respeto que tengo hacia el colectivo arbitral, así como hacia el valioso y complicado trabajo que realizan cada partido. También quiero pedir disculpas a mis compañeros, a toda la afición y, especialmente, a todos los que me tienen como ejemplo. Lo siento de veras.
Todo el mundo puede equivocarse y, sin duda, este domingo no estuve acertado. No es la imagen que hay que dar en un campo de fútbol. Asumo mi error y sólo puedo decir que lo siento, que mi compromiso con el Sevilla FC es hoy un poco más grande que ayer y así trataré de demostrarlo".
La ausencia de Fernando en la primera parte de la temporada la pagó duramente su equipo, que no encontró recambio en una plaza clave para el equilibrio defensivo. Con Gudelj en mejor forma y con más protagonismo, al menos, sí tiene un recambio, pero no así en el centro de la defensa, donde sólo Nianzou está ahora mismo en condiciones de jugar.