Sevilla
R. Madrid
"Tengo sensaciones encontradas. Estoy agradecido a los futbolistas, que fueron valientes e hicieron un buen partido. Nos golpearon, pero insistimos. El duelo fue parejo, pero tuvimos más remates al arco. Nos habría gustado sumar los tres, porque vimos que fue posible y el equipo estaba bien, pero nos empataron rápido. Lo que les pedí, que fuéramos valientes y plantáramos cara, lo hicieron. Hay cosas que mejorar, pero es para estar orgullosos. Nos animamos a jugar y hay muchas cosas que rescatar de la entrega en el repliegue y la contención, pero también por fuera en ataque y la presión", explicaba ante los medios de comunicación Diego Alonso tras su estreno como entrenador del Sevilla FC con un meritorio empate (1-1) frente al Real Madrid que bien pudo caer de cualquier lado, ya que ambos tuvieron ocasiones claras para llevarse los tres puntos.
"Al menos, elegimos el camino que a mí me gusta, el que he planteado a la plantilla. Nos queda mucho por recorrer, pero hemos visto que somos capaces de tutear al líder y atacarle de la misma manera, sin miedos ni complejos. Estoy feliz, pero habríamos querido ganar, sin duda. El rendimiento del equipo, eso sí, me deja tranquilo", añadía el ex seleccionador charrúa, que no quiso cargar sobre nadie tras el fallo a balón parado en el 1-1, con Carvajal ganando en el salto a En-Nesyri: "Hay virtudes también de los rivales; tendremos que hacer más ajustes para mejorar en cada faceta". Habló también el míster blanquirrojo del debutante como titular Soumaré, al que vio "bien. Le costó entrar, pero se fue encontrando poco a poco, participó mucho, dio energía y quite, y participó también en la distribución". Y, finalizando con los nombres propios, Nyland antes que Dmitrovic, como Mendilibar: "Desde mi posición, sé que tengo dos grandes porteros, pero decidí dar continuidad al que venía jugando. Pero los dos tienen un gran nivel, juegue quien juegue".
Ahora, toca redoblar esfuerzos para vencer el martes en la UCL al Arsenal FC, un rival tan temible como el Madrid: "El desgaste de hoy, con sólo dos días de recuperación, es un desafío para nosotros, además de la envergadura del rival. Pasamos del líder de LaLiga al de la Premier League (el City lo ha rebasado en la table tras igualar los de Arteta con el Chelsea, con los mismos puntos eso sí). Confiamos en lo que podemos hacer. Cada cual tiene sus armas y trataremos de imponernos". Para terminar, un halago al Sánchez-Pizjuán: "El estadio ha estado como siempre. No ha cambiado de cuando yo jugaba. La gente fue fantástica, es fantástica y seguirá siendo fantástica. Me alegra que estuviera con el equipo y que éste se lo haya devuelto en el campo. Una sinergia importante a la que ojalá podamos dar continuidad".