Aitor Torvisco4 min lecturaLa 34ª edición de la Copa Africana de Naciones (CAN) que se lleva disputando en Costa de Marfil desde el pasado 13 de enero tendrá una final inédita, después de los resultados registrados en los dos duelos de semifinales disputados este miércoles. Por un lado, la anfritriona se deshizo de la República Democrática del Congo por un ajustado 1-0 gracias a un solitario gol de Sebastian Haller, que le dio a su país el pase a su quinta final continental. Horas antes, Nigeria se había hecho con la primera plaza para el gran duelo por el título que tendrá lugar el próximo domingo en el Estadio Olímpico de Ebimpé. Las 'Águilas Verdes' disputará su octava final tras imponerse a Sudáfrica con polémica y sufrimiento; pues el VAR anuló el que habría sido el 2-0 para pitar el penalti del 1-1 que llevó a la prórroga una eliminatoria que los nigerianos se llevaron en la fatídica tanda.
Bajo la batuta de Emerse Fae, Costa de Marfil supo rentar el factor campo para cumplir con su papel de favorito ante un adversario, la RD Congo que buscaba su primera final en la Copa de África. El cuadro marfileño luchará por su tercer cetro continental, tras los dos que ganó en 1992 y en 2015, ambas ante Ghana. Además, fue subcampeón en 2006 y en 2012, cuando perdió en penaltis ante Egipto y Zambia respectivamente.
El equipo congoleño -que luchará el sábado por el tercer y cuarto puesto contra Sudáfrica- mantuvo el tipo hasta la hora de juego, cuando encajó un tanto que sería definitivo. En el 65', un centro colgado al área por Max Gradel desde la banda derecha fue controlado por Sebastian Haller, que remató con una volea ante la que no pudo hacer nada el meta Loionel Mpasi-Nazu. A partir de ahí, ya con el marcador a favor, Costa de Marfil se hizo con el control del juego y contuvo los intentos a la desesperada de su rival por meterse de nuevo en la eliminatoria.
La primera semifinal de la CAN se disputó este miércoles en el estadio Municipal de Bouaké entre Nigeria y Sudáfrica, un choque que se decidió en 11 penaltis: los dos del tiempo reglamentario y los nueve que se tiraron en una tanda que acabó con triunfo por 4-2 para los nigerianos, que aspirarán a ganar el domingo su cuarto título tras los logrados en 1980 (3-0 a Argelia), en 1994 (2-1 a Zambia) y en 2013 (1-0 a Burkina Faso). Además, fueron subcampeones en las ediciones de 1984, 1988, 1990 y 2000.
Nigeria, entrenado por Jose Peseiro, ganaba por la mínima desde el 67', cuando William Troost Ekong transformó un penalti cometido sobre Victor Osimhen. El jugador del Nápoles fue también protagonista en el 85', tras marcar un gol que parecía ser el de la sentencia. Sin embargo, el VAR llamó al árbitro, que anuló el 2-0 por una falta previa, dentro del área nigeriana, de Alhassan Yusuf sobre Percy Tau. De 2-0, a penalti a favor de Sudáfrica que Teboho Mokoena convirtió en el 1-1 en el 89'. La igualdad se mantuvo en la prórroga a pesar de que los sudafricanos se quedaron con diez por la expulsión de Grant Kekana y todo se resolvió desde los once metros.