La Real Sociedad no se olvida de Sergio Canales

Han pasado seis años desde que Sergio Canales decidiese no renovar para irse como agente libre al Real Betis y actualmente juega en el Monterrey mexicano, pero en Donosti se han olvidado del cántabro: hace unos días, Roberto Olabe le mencionaba para explicar lo que busca en el mercado y ahora es Álvaro Odriozola quien admite que le añora

La Real Sociedad no se olvida de Sergio Canales
Canales celebra un gol para la Real Sociedad en compañía de Odriozola y Agirretxe. - Cordon Press
Aitor TorviscoAitor Torvisco 6 min lectura

Hay un refrán que dice que uno no valora lo que tiene hasta que lo pierde y sirve a la perfección para resumir la sensación de la Real Sociedad con Sergio Canales, un sufridor nato y un ejemplar resiliente que además de una indestructible mentalidad tenía una calidad superlativa que las lesiones impidieron brotar en el Real Madrid, el Valencia CF o en el conjunto 'txuri-urdin', quien a pesar de ello intentó por todos los medios retenerle cuando se enteró de que no renovaría su contrato en junio de 2018 porque ya lo tenía hecho con un Real Betis que disfrutó de la mejor versión del centrocampista cántabro, de 33 años y ahora en las filas del CF Monterrey mexicano. Seis años después de su marcha, en San Sebastián aún no se han olvidado de Canales, algo que hace unos días puso de manifiesto el director de Fútbol, Roberto Olabe, y que este fin de semana ha refutado el futbolista Álvaro Odriozola. Le echan de menos.

En una extensa entrevista con Naiz.eus, Olabe admitió que el fichaje que más necesita esta Real Sociedad es 'un Canales'. De hecho, cree que esa carencia existe desde el mismo día que el santanderino se fue al Betis después de cinco años como blanquiazul: "Cuando hablamos del modelo de juego tenemos claro a lo que queremos llegar, a lo que llamamos la zona cinco, a la zona donde impacta ese volante ofensivo. Desde que estoy en la Real ha sido clave el rendimiento de ese jugador. Lo fue Canales en mis tres primeros meses, en los que intenté hacerle ver que la Real era su lugar en su final de contrato, Al año siguiente de marcharse Canales (18/19) no encontramos esa figura. Nos hizo daño que se fuera gratis y nos obligara a hacer una inversión".

En una línea similar se ha expresado Odriozola, que también se fue ese mismo verano, en su caso traspasado al Real Madrid después de jugar el Mundial de Rusia 2018. El punto de partida es totalmente distinto, pues el lateral donostiarra no se refería a la planificación (suena Carlos Soler para un rol muy similar), sino que rememoraba su mejor etapa como 'txuri-urdin' y la mejor versión de su carrera. El caso es que también acabó acordándose de Sergio Canales: "En ese momento (17/18) ha sido cuando más he disfrutado en el campo de fútbol porque el sistema de juego era perfecto para mí. Tenía delante a uno de los mejores jugadores de la historia del club, Xabi Prieto, un extremo desbordador al que le gustaba meterse por dentro y todo el juego se basaba en que él centraba, yo le doblaba y me la metía. Luego, igual cuando estaba Canales, que también tendía a meterse para dentro. Y yo con 21 años era una bomba y con un físico muy bueno me lo pasaba en grande con ellos".

"Lo teníamos todo muy claro con Eusebio. Éramos muy ofensivos porque nos soltaba las riendas y... ¡adelante! Fueron momentos muy buenos, yo me sentía magníficamente bien dentro del equipo y del vestuario. Ha cambiado mucho porque de ese equipo solo quedan Mikel Oyarzabal y Aritz Elustondo y nos lo pasábamos muy bien. Me sentía muy bien en ese sistema de juego y disfruté muchísimo esa temporada", explica Odriozola en una entrevista con Noticias de Gipuzkoa, en la que admitió que echa de menos aquella época y a aquellos compañeros, todo ello sin desmerecer los logros conseguidos con Imanol Alguacil -"Sin él no estaría aquí", remarca- y con una plantilla a la que aplaude por su brillante papel en la Champions y por la quinta clasificación seguidas para Europa, hito sin precedentes en la Real Sociedad.

"Si te hablo como aficionado, para mí no ha habido un momento en el que la Real haya jugado como en la Fase de Grupos de la Champions de este año. Fue excelente. El nivel está ahí y hay que llegar en ese punto de forma óptimo a febrero y marzo, que es donde te juegas el todo por el todo. Hubo un pequeño bajoncito y es un momento muy importante de la temporada. Se llegó a la excelencia en esa fase de grupos e incluso en la primera parte contra el PSG, que siempre recordaré el larguero de Merino, y qué podría haber pasado si ganas ese partido o metes el primer gol. Tenemos ese nivel y hay que llevarlo lo máximo posible la próxima temporada", explicó, antes de acordarse de la fiesta en el campo del Betis: "Sabe muy bien ganar en el Benito Villamarín, que es un campo muy complicado, contra el rival directo con el que te estás jugando todo. En el vestuario fue una explosión de júbilo. En LaLiga ha sido muy meritorio lo que se ha hecho".