Por fin, Mikel Merino disfruta del regreso a la normalidad. Es una normalidad muy exigente, pero el navarro explica que justo esa ambición fue uno de los motivos principales por los que decidió dejar la Real Sociedad para firmar por el Arsenal FC a cambio de 32 millones de euros más variables. El traspaso, la tercera mejor venta de la historia del club 'txuri-urdin' y el segundo fichaje más caro de los 'Gunners' para este curso tras los 45 kilos de Calafiori, se eternizó en el tiempo por la parsimonia del club británico. Con todo cerrado con el centrocampista desde hace meses, retrasó la negociación entre entidades y la operación no se hizo oficial hasta el 28 de agosto, apenas 48 horas antes del cierre del mercado estival. Para colmo de contratiempos, en la primera semana de trabajo el internacional español sufrió una lesión en el hombro que le ha tenido un mes parado hasta este pasado martes, cuando por fin pudo debutar, poniendo el final definitivo a uno de los 'culebrones' del verano.
Después de unos 10 días entrenándose con el grupo con muy buenas sensaciones, Mikel Merino entró en la convocatoria de Mikel Arteta para el duelo que enfrentaba al Arsenal FC con el PSG de Luis Enrique, en la segunda jornada de la Fase de Grupos de la Champions League. A falta de algo menos de media hora para el final, el campeón de la pasada Eurocopa saltaba al terreno de juego para disputar los últimos 27' más el añadido y se tomaba su particular venganza contra los parisinos, que apearon a la Real Sociedad en los octavos de final de la pasada edición de la máxima competición continental ganando los dos encuentros (2-0 y 1-2 en Anoeta, donde además marcó el único gol donostiarra).
El Arsenal demostró estar mucho más rodado para las grandes noches europeas que el París Saint-Germain y se impuso por 2-0 con goles de Kai Havertz y Bukayo Saka, aprovechando la desastrosa noche de Gianluigi Donnarumma, culpable de los dos tantos locales. Al término del encuentro, Merino atendió a la Agencia EFE para explicar sus sensaciones tras su esperadísimo debut con el Arsenal y enumerar los motivos por los que se decantó por aceptar la oferta que le trasladó el siempre insistente Arteta. "Aquí la filosofía es ganar, ganar y volver a ganar y, además, no vale con ganar de cualquier manera", expresó.
"Tenía muchísimas ganas, después de fichar por un club que apuesta por ti y que pone toda la carne en el asador, que en la primera sesión te rompas la escápula... pues no es la mejor manera de empezar, pero bueno, es verdad que durante este período de recuperación me ha dado tiempo para crecer, para madurar, para aprender y para conocer a mis compañeros. Han sido cuatro semanas y media de larga espera, con muchas ganas de jugar. Esas ganas las he utilizado para estar lo mejor preparado para el día de hoy", añadió Mikel Merino en la zona mixta del Emirates Stadium.
El que fuera el dorsal 8 de la Real Sociedad, que en el Arsenal lucirá el '23', ensalzó los valores que le ha transmitido el Arsenal en estas pocas semanas y explicó que encajan a la perfección con su propia filosofía de vida. "Me enseñaron la metodología, la manera de trabajar, los objetivos y la mentalidad del club, antes de fichar. Todo ello va de la mano con mis propios valores y con lo que quiero conseguir en mi carrera. Dije 'Éste es el paso que quiero dar en mi carrera".
"La clave es la mentalidad, es lo que te dejan ver desde el primer momento. Hay que ganar, ganar y volver a ganar. Y no de cualquier manera, siendo un equipo dominador, que se adapta a los contextos y ese tiene que ser el listón. El entrenador (Mikel Arteta) es una persona con un carácter ganador increíble y con una mentalidad trabajadora y hay que seguir su liderazgo", concluyó el internacional español, felicitado por sus compañeros por su debut con un triunfo en esta segunda jornada de la Champions 24/25.