Con la entrada del mes de marzo llega el tramo final de la temporada, donde los equipos ya no pueden especular y cada partido cuenta aún más que al principio de la campaña. Las últimas jornadas ligueras, la definición de copa y en el plano de los equipos grandes, la Champions. El Real Madrid ya sufrió mucho el miércoles para asegurar su presencia en cuartos de final, ya que el Leipzig les complicó mucho en la vuelta en el Bernabéu, como ya había hecho en Alemania. Los blancos mostraron sus costuras, sobre todo a nivel defensivo, pero de cara a las siguientes rondas es muy posible que tengan un refuerzo al que esperan con los brazos abiertos, Eder Militao.
Militao sufrió una rotura del ligamento cruzado anterior de la rodilla izquierda el pasado 12 de agosto, en la primera jornada de LaLiga contra el Athletic Club, y ya encara las últimas semanas en el dique seco. El carioca participó de forma activa durante una parte del entrenamiento al mismo ritmo que sus compañeros, tanto con balón como sin él, y avanza en a pasos agigantados en su recuperación. Su técnico, Carlo Ancelotti, ya se está planteando que a partir de mediados de abril podrá contar él, cuando se estén disputando los cuartos de Liga de Campeones y con el duelo ante el Barça de por medio. Una adición vital, ya que con su compañero en el centro de la zaga David Alaba también está parado, debido a que sufrió su misma lesión pero en diciembre, Carletto ha tenido que usar soluciones de emergencia como Tchouameni de central, y aunque ha salido bien, de cara a las grandes noches se antoja corto. El bajón de nivel de Nacho también apremia al 3 a volver cuanto antes.
Esos plazos también los maneja el meta Thibaut Courtois, que sufrió la misma lesión tan solo dos días antes que Militao, en un entrenamiento en la Ciudad Deportiva Real Madrid de Valdebebas. El belga está viendo como Lunin ocupa su puesto con mucha decencia, por lo que no debe apurar, ya que sus 199 centímetros en una dolencia así son un peligro constante, aunque en cuanto esté, jugará.
Por ahora los blancos están a la espera de conocer su rival en la antepenúltima ronda europea, para lo que aún queda más de una semana, pero mientras sigue enfrascado en mantener la solvencia de la que presume en LaLiga, donde aventaja al Girona en 7 puntos y este fin de semana tendrá un reto difícil, ya que recibirán la visita del Celta de Vigo en el Bernabéu, donde no estará Jude Bellingham.