Real Madrid, FC Barcelona, Real Betis Balompié y Valencia CF juegan la Supercopa de España esta semana, del 11 al 15 de enero, la cual se celebrará en Riad, Arabia Saudí, en una nueva edición que llega más cargada de polémica que nunca por el famoso reparto entre clubes participantes, organizadores e intermediarios en la que la empresa de Gerard Piqué, Kosmos, se embolsará mayor dinero que los equipos que jugarán la competición. A pesar de ello, hay en juego un título y también más dinero que las cantidades ya fijadas y pactadas, puesto que por llegar a la final y ganar la Supercopa de España se da más dinero.
Real Madrid, FC Barcelona, Real Betis y Valencia CF buscarán en la Supercopa de España ganar el primer título de la temporada, pero al mismo tiempo se juegan un plus económico que nunca vienen mal a las cajas de los clubes. Y es que por llegar a la final se consigue un millón de euros, mientras que si se gana el título, el equipo campeón se embolsará dos millones de euros (uno por disputar la final y otro por ganar).
Este dinero es el concepto de variables que tiene el torneo, a lo que hay que añadir que a cada uno de los clubes recibirá un total de 300.000 euros para los desplazamientos y los hoteles en los que se hospedarán.
En cuanto al concepto de fijos, hay que recordar las cifras ya publicadas en su día. El FC Barcelona y el Real Madrid ganarán 2'8 millones de euros sólo por participar, el Valencia CF se llevará 1'7 millones de euros, mientras que el Real Betis será el club que menos cobre de los participantes embolsando sólo 750.000 euros a pesar de ser el actual campeón de la Copa del Rey.
Todo este dinero suma en total 12'2 millones de euros que van para los clubes, por los 23'8 que van destinados para la RFEF, que posteriormente dará 20 millones de euros al fútbol no profesional. A todo esto hay que sumarle la comisión a la compañía Kosmos de Gerard Piqué, que fue intermediaria del acuerdo firmado entre Luis Rubiales, presidente de la RFEF, y Arabía Saudí, que asciende a cuatro millones de euros.
Estas cifras están sujetas a una condición, que no es otra que si Real Madrid o FC Barcelona no estuvieran ninguno en la final, la RFEF ganaría 35 millones de euros en lugar de los 40 millones de euros pactados en primera instancia.