Diego Tristán sigue ligado al mundo del fútbol. En su pueblo natal, La Algaba, hace ya 10 años que se ocupa del club de su tierra, donde ha colaborado para que éste crezca y acoja en estos momentos a más de 400 niños que aman el balompié. Está orgulloso de lo logrado, pero tras dar forma a un proyecto que le ha otorgado una enorme satisfacción personal, ahora quiere iniciar un nuevo rumbo profesional en los banquillos.
El ex jugador de RCD Mallorca, Deportivo de la Coruña o Cádiz CF, tiene claro que tras una década alejado de la primera línea del fútbol es complicado hacerse un sitio. Sin embargo, no por ello quiere dejar pasar la oportunidad de poner en práctica un revolucionario proyecto que desea iniciar con Juan Carlos Valerón, amigo y ex compañero en el club gallego. Así lo explica en una entrevista concedida a Relevo.
"He entrenado 10 años en mi pueblo. Quería dar un empujón al equipo de mi tierra y hemos conseguido pasar de tener cuatro o cinco equipos a 24 con más de 400 niños. Ahora me gustaría dar ese paso de entrenar fuera. Sé que es complicado después de tantos años y siendo muchos los compañeros que están ahí buscando iniciar una carrera en los banquillos", explica antes de hablar de lo que desea hacer junto a su hermano, Valerón.
"Hemos estado hablando y estamos pensando en dar ese salto. A ver si podemos el año que viene montar ese paquete que, entre comillas, es algo nuevo; algo a lo que queremos dar vida siendo los dos primer entrenador. Nos complementamos perfectamente y tenemos mucho que ofrecer. Nos sacamos el título de entrenador con Sergio (González) allí en la Real Federación Española de Fútbol. Tengo el proyecto de que entrenemos los dos juntos como primer entrenador, algo que nunca se ha hecho. A ver, que yo sé que llevo mucho tiempo fuera aquí en el pueblo, pero es una idea bonita que queremos explorar", expresa.
¿Es posible hacer algo así? Suena complicado. La tradición futbolística habla de un entrenador y ayudantes; y sí, es cierto que dar forma a un tándem en el que dos personas tenga exactamente el mismo peso rompería con lo establecido.
Más allá de hablar de su futuro, Tristán ha dejado claro que su fama de jugador que acudía a fiestas es real, pero que en ningún caso hacía cosas diferentes al resto de sus compañeros.
"Yo he salido como cualquier compañero, pero lo cierto es que todos lo hacían igual. Me reía mucho con Joan Capdevilla. Él decía: 'salimos todos, no pasa nada, la culpa se la van a echar a Diego'. Es algo que siempre me ha molestado mucho. Yo, por ejemplo, nunca ha salido el día antes de un partido. Dos o tres días antes pues sí. Yo necesitaba descansar, recuperarme. Físicamente tenía que ser así", sentencia.