Real Betis 0-0 Real Sociedad: Compra el billete, pero deja pasar el tren

Tenía que ganar para subirse de nuevo al tren de la Champions League y no lo hizo. A partir de ahí, cualquier análisis es válido, tanto el que refiera la importante oportunidad perdida para quedarse a tres puntos de la Real Sociedad como el que defienda los merecimientos del Real Betis, que sufrió nada más llegar a la estación, fue avanzando con fluidez en la cola y compró varios billetes, léase méritos, aunque terminó por dejar ir su transporte a la ilusión. Quedan 21 puntos, cierto, y el 'goal-average' se queda en Heliópolis, donde también sonreirían (ya lo hacían sin este 0-0) en un hipotético triple empate con guipuzcoanos y villarrealenses, si bien mucho deben mejorar en ataque los de Manuel Pellegrini, que visitarán ahora el Camp Nou y San Mamés, para que les dé tiempo a enjugar esa diferencia. Este Martes de Feria, sufrieron lo indecible, se levantaron antes que en Pamplona y (lo mejor) sin daños, y fueron creciendo hasta arrinconar en la segunda mitad a su oponente, que se defendió como gato panza arriba.

De inicio, costaba un mundo llevar la iniciativa al anfitrión, atosigado por un rival vertiginoso y preciso en sus combinaciones en campo contrario, donde la presión alta hacía estragos. Un libre directo de Brais Méndez que abortó Rui Silva (luego, repetirían los protagonistas y el resultado, pero con pelota en juego), una mala entrega de Aitor que complicó sobremanera a Pezzella ante Sörloth y sendas pérdidas de Rodri que habilitaron al noruego constituían un asedio en toda regla durante los primeros nueve minutos que despertó la queja del público para espolear a los suyos. En la otra punta del campo, Ayoze peleaba muy solo en busca de algún despiste de Remiro y sus centrales. Pero se rebasó el cuarto de hora sin solución al entuerto. Antes al contrario, Miranda evitaba lanzándose al suelo que Kubo fusilara en el segundo palo un saque de banda de Aihen Muñoz que se paseó incomprensiblemente por el área.

La preocupación era evidente en el 'Ingeniero' y sus pupilos, incapaces de dar dos pases seguidos y resignados a achicar agua. Acumulaba muchos hombres por dentro Imanol, que conseguía que los heliopolitanos persiguiesen sombras continuamente, una dinámica que éstos trataron de contrarrestar con una acción aislada y personal, aunque tremendamente peligrosa: córner que saca en corto Canales y centro-chut de zurda de Ruibal que se dirigía a la misma escuadra, lo que obligó al meta realista a desviarla con la yema de los dedos. Cruzaban los dedos en La Palmera para que el susto obrase de punto de inflexión o que, como poco, sirviese para equilibrar la contienda, con la pausa de hidratación como aliada. De hecho, volvió mejor el Betis de este 'impasse', hasta el punto de que Le Normand tuvo que impedir en plancha que Ayoze apuntillase el servicio de Miranda.

Los vascos contestaron con muchas interrupciones del juego a través de una secuencia notable de faltas. Mientras tanto, Canales, William y Rodri se aplicaban en prolongar las posesiones, dando paso a una recta final del primer tiempo con mayores alternativas, pero de escaso fútbol. A tres del descanso, con todo, nuevo aviso en verdiblanco, con una fenomenal transición en la que los cuatro béticos más adelantados tocaron de primeras para que el cántabro marrase a bocajarro, algo escorado eso sí, con su pierna mala. Ni tan mal las sensaciones para marcharse a vestuarios, porque los negros nubarrones que se cernían simbólicamente sobre las aspiraciones de Champions del conjunto de La Palmera en el arranque se disipaban sin secuelas y con toda la segunda mitad por delante para que el giro de tuerca se convirtiese en una realidad. Incluso, esta fase la abrochó un testarazo forzado de Miranda que se iría ligeramente alto.

Pellegrini dio un paso al frente para ir a por el partido, consciente de que era el último tren por la cuarta plaza, y Borja Iglesias y Luiz Henrique suplían al comenzar la reanudación a Guardado y Rodri. Y la recompensa estuvo a punto de llegar de inmediato, pero el 'Panda' no llegó por poco a un balón tocado por Ruibal que se sacó de encima como pudo Remiro. Mucho más reconocible, el anfitrión percutía a la espalda de la adelantada zaga donostiarra, con el portero de nuevo saliendo de su zona para cortar una combinación entre Ayoze y el ex de Fluminense. Con más tiempo para pensar, la calidad se abría paso en las huestes heliopolitanas y el mismo Álex impedía que el centro-chut de Aitor conectase con su mejor amigo en boca de gol. A renglón seguido, Canales pinchó un balón dentro del área, pero el '9' no atinó.

Le Normand, con un cabezazo desviado a centro de Illarramendi, materializaba la contestación 'txuri-urdin', aunque el partido parecía inclinado hacia la meta contraria. En este sentido, una buena combinación en banda izquierda entre el '10' y el '33' estuvo a punto de convertirse en el 1-0, pero, tras el reverso, el canario lanzó muy cerca de la escuadra, aunque alto. Sin solución de continuidad, Luiz Henrique la puso con la derecha para que Borja la desviase tímidamente, no entre palos. El propio Iglesias cazaba luego un cabezazo de Canales y la ponía para que William enviase un zurdazo, sin dejarla caer, a las nubes. Faltaba precisión, si bien se finalizaban los ataques, como mandan los cánones. Mucho más cerca lo tuvo el santanderino en el 74. Lástima que, de nuevo, tras una excepcional apertura de Ayoze a Miranda y el pase atrás del olivarense, le cayese a la pierna mala, aunque, con todo, el zurdo la mandó casi al ángulo.

Las transiciones béticas por fuera invitaban a pensar en una sorpresa postrera, aunque, a once del epílogo, Aitor tuvo todo el tiempo del mundo para pensar lo que hacer en la línea de fondo, tratando sin suerte de engañar a Remiro en el primer palo. El de Sallent, en dos tiempos, tampoco atinó a renglón seguido en otra penetración del '33' por el flanco contrario. Trataba la Real de alargar sus posesiones para cortocircuitar los intentos verdiblancos, pero la volvió a tener Ayoze sobre la bocina, tras una nueva combinación entre Canales y Miranda, con dejadas del 'Panda' y Luiz Henrique para el disparo mordido del aún atacante del Leicester, taponado por Gorosabel a la postre. Martínez Munuera decretó cinco de alargue, aunque las fuerzas ya escaseaban. De hecho, Mikel Merino tuvo el 0-1 para sentenciar, si no lo está ya la cuarta plaza, pero Rui Silva se rehízo en dos tiempos para impedir que el '8' realista aprovechase el servicio de Barrenetxea.

FICHA TÉCNICA.-

Real Betis: Rui Silva; Aitor Ruibal, Pezzella, Luiz Felipe, Miranda; Guido Rodríguez, Guardado (Luiz Henrique 46'); Canales, William Carvalho, Rodri (Borja Iglesias 46'); y Ayoze.

Real Sociedad: Álex Remiro; Gorosabel, Zubeldia, Le Normand, Aihen Muñoz (Aritz Elustondo 73'); Zubimendi, Illarramendi (Mikel Merino 62'), Brais Méndez (Silva 62'), Take Kubo; Oyarzabal (Barrenetxea 62') y Sörloth (Carlos Fernández 73').

Árbitro: Martínez Munuera (valenciano), con el catalán Estrada Fernández en el VAR. Amarillas al local Guido Rodríguez, así como a los visitantes Zubimendi, Aihen Muñoz y Zubeldia.

Incidencias: Encuentro correspondiente a la jornada 31ª de LaLiga, disputado en el Estadio Benito Villamarín de Sevilla ante 42.294 espectadores.