El Real Oviedo casi certificó la salvación en casa del defenestrado Ibiza. El equipo de la capital del Principado de Asturias sumaba su segundo triunfo consecutivo y, con 49 puntos, se alejaba a diez puntos de las plazas de descenso y se colocaba a uno sólo de los 50 que marca la salvación virtual.
La alegría era importante en un plantel que ha sufrido mucho este año y que, poco a poco, ha ido escalando posiciones de la mano de Álvaro Cervera. Sin embargo, había un jugador que estaba especialmente contento y que no pudo contener las lágrimas al final del partido. Se trata del ex del Real Betis Víctor Camarasa.
El jugador valenciano, que llegó en el mercado invernal al club carbayón después de desvincularse del Betis, fue por primera vez titular después de que Cervera le hubiera dado ya media hora en cada uno de los dos últimos partidos. Y no sólo eso sino que pudo aguantar todo el partido y demostró que está recuperado para el fútbol.
Hacía más de mil días que no jugaba un partido entero. Fue el 11 de julio de 2020 en el Santiago Bernabéu, en las últimas jornadas de Laliga de la pandemia y en una segunda mitad de la temporada en la que Camarasa estuvo cedido en el Alavés. En total, 1.015 días, casi tres años completos.
Tras esto, regresaría al Betis con el visto bueno de Manuel Pellegrini, que se estrenaba como verdiblanco en la 20-21, pero una grave lesión de rodilla en la pretemporada le dejó todo el año en blanco. En su segundo año no le fue mucho mejor y diferentes problemas le impidieron jugar. Sólo disputó 7 partidos de LaLiga o, más bien, siete 'ratos', porque entre todos sólo sumaron 101 minutos. Pese a ello, el Betis le renovó un año más y le dejó recuperarse en sus instalaciones. Reapareció durante el parón mundialista ante el Atalanta y, una vez encontró equipo en invierno, se marcha con palabras de agradecimiento hacia el Betis y los béticos.
En Oviedo le ha costado entrar. No en vano, lleva casi tres años en blanco y tenía muchas dudas. Pero él tenía claro que estaba recuperado y unas pruebas en Sevilla así lo confirmaron. Álvaro Cervera lo ha tratado con mucha prudencia, ha ido dándole minutos hasta que lo ha visto preparado para afrontar un partido completo.
"Me he emocionado al final del partido. No quiero acordarme ni de la última vez que jugué de titular. Hoy me he vuelto a sentir otra vez futbolista. El simple hecho de calentar con los titulares ya es algo que hacía mucho echaba de menos. Estoy muy contento. He aguantado y me he sentido muy bien. Lógicamente, me falta ritmo, pero en líneas generales es todo positivo", señalaba Camarasa al final del partido. Este fin de semana, el valenciano ha vuelto a llorar, pero esta vez ha sido de alegría.