Gracia Ávila3 min lecturaJulián Álvarez se convirtió en uno de los grandes protagonistas del triunfo de Argentina frente a Polonia, sellando el gol de la tranquilidad, y a su vez, estrenando titularidad en el Mundial de Qatar, sentando a Lautaro. Con 22 años está llamado a ser uno de los héroes de la albiceleste y a repetir muchas veces el gesto de Spiderman con el que celebra sus goles y por el que se ha ganado el apodo de ‘La Araña’.
Deportivamente está creciendo al lado de Erling Haaland e impresionando a Pep Guardiola en el Manchester City, pero sus inicios en el mundo del balompié quedan muy atrás y están vinculados de alguna forma al Barcelona. Circula un vídeo, de cuando tenía 11 años, que le dijeron que eligiera entre Madrid o Barcelona: eligió Barcelona. Y sin ser todavía un adolescente, no iba mal encaminado, ya que se le ha relacionado con el Barça, tanto a él como a Enzo Fernández. Ambos han estado anotados, según apunta Sport, en la agenda del club azulgrana. Desde el Camp Nou manejaban excelentes informes del futbolista, que desde pequeño ha tenido simpatía por el Barça, pero finalmente decidieron invertir en otras opciones como Ferran Torres.
En su día ya se ganó los elogios de Guardiola: “Es un jugador increíble. Se ha adaptado y está luchando desde el día uno. Hay que tener en cuenta que compite por el puesto con el mejor delantero del mundo”. Para el técnico es una pieza polivalente, ya que puede jugar como ariete y como extremo. Llegó al equipo por algo más de 20 millones de euros.
En Inglaterra también se ganó muy el cariño y el respeto de compañeros como Rodri que lo definió como una persona muy tímida.
A través de su cuenta de Instagram, Emilia Ferrero, novia de Julián Álvarez, también le dedicó un emotivo post tras el triunfo de Argentina frente a Polonia y la consecución del pase a octavos de final: “Vamos mi amor. Simplemente fútbol. Son solo sueños que se alcanzan”. Y precisamente de sueños habló también el futbolista con apenas 11 años, cuando le preguntaron sobre “¿cuál era el suyo?” y no dudó el responder: “Jugar un Mundial”. Cumplido.
Frente a Polonia Leo Scaloni sentó a Lautaro para darle una oportunidad que no desaprovechó, ahora habrá que ver la decisión que tomará el técnico frente a Australia. Como dicen los argentinos: "¡Qué la araña no deje de picar!".