Alberto Viñuela4 min lecturaEn el Málaga CF ya se ha asimilado el descenso del equipo a Primera RFEF. En el vestuario es una realidad ya palmaria, pese a que el mensaje de Pellicer y de los futbolistas es el de ganar los tres partidos que quedan por si suena la flauta.
La entidad de Martiricos se prepara para un impacto brutal. Salir del fútbol profesional después de 25 años de travesía con aquel ascenso protagonizado por Guede, lo que son las cosas el que empezó siendo el entrenador este año, en 1998. Las reuniones en el seno interno del club ya han comenzado.
Si el equipo pierde la categoría, se prevé un segundo ERE en la era del administrador judicial. Esto no afectará a la plantilla deportiva, sino que irá directamente a los empleados del club. Hay que recordar que cuando José María Muñoz llegó en febrero de 2020 al club ya ese primer verano se vió obligado a hacer una limpieza en la plantilla de empleados y en la de jugadores.
Se esperan duras bajas en cada departamento. A pesar de los ingresos que se esperan de LaLiga y la RFEF, en concepto de seguro, habrá más de un 70% de los empleados del club puedan perder su trabajo.
La diferencia con respecto a aquella vez, es que ahora el club boquerón cuenta con un director general. Kike Pérez será el encargado junto al propio administrador de llevar a cabo este plan de reestructuración. "Han sido horas durísimas, una noche larguísima. Ha salido el sol y con ganas de ir a La Rosaleda para empezar a trabajar", señaló el director general a su llegada de Ponferrada.
El club ha lanzado un comunicado en las últimas horas en el que pide disculpas a su afición por la situación y lo ocurrido en Ponferrada.
"Querida afición, estamos pasando por los momentos más duros que pueda vivir el malaguismo. Somos conscientes del profundo dolor y rabia que siente nuestra hinchada y esta realidad es devastadora para el seno de la entidad. Las muestras de amor y compromiso demostradas por el malaguismo hacia su equipo son increíbles. El no poder devolver ese sentimiento en forma de resultados es desgarrador".
Y el comunicado sigue: "La afición es el valor más importante que puede tener un club de fútbol y el MCF tiene la gran suerte de contar con una sin igual. Esta afirmación responde a actos tangibles, como la presencia de más de quinientos malaguistas en Villarreal, Lugo y Ponferrada, o convertir a La Rosaleda en el estadio con mayor asistencia de la categoría pese a la agónica situación clasificatoria. La Entidad entiende el malestar generado y comparte el insufrible dolor. Solo podemos tener palabras de agradecimiento y de disculpa, aunque somos conscientes de que nunca serán suficientes".