Uno de los grandes retos a los que se enfrentaba Míchel Sánchez en el presente curso era ser capaz de dar continuidad a un gran Girona FC. Para ello, el entrenador de los catalanes sabía que contaba con el hándicap de los numerosos cambios que se habían dado (y se estaban dando) en la plantilla con la temporada ya empezada; tanto es así que llegó a admitir que los partidos oficiales estaban siendo algo así como un banco de pruebas para conocer a sus jugadores. Pues bien, llegada la hora de la verdad, con el equipo a solo tres puntos de los puestos de descenso a Segunda división ha sido la vieja guardia la que ha dado la cara por él.
Miguel Gutiérrez y Arnau Martínez, dos pilares para Míchel, lideraron a los de Montilivi en el trabajado triunfo de este sábado ante el CD Leganés (4-3) con la enésima exhibición de inteligencia táctica, hasta el punto que el técnico rojiblanco preguntó, en tono de broma, si en la sala de prensa había alguien que supiera de qué juegan.
"Porque yo no lo sé. Tienen la idea de juego muy interiorizada y han hecho un partido increíble, tanto en defensa como en ataque. Los dos han estado magníficos en todas las situaciones de juego. Interpretan muy bien lo que queremos y ahora mismo son dos anclajes muy fuertes de la manera de jugar. Están sosteniendo la manera de jugar del Girona", comenta sobre ambos jugadores.
Míchel tiene claro que necesita mucho de esto para estabilizar al equipo. Después de la victoria del 22 de octubre ante el Slovan Bratislava, la primera de la historia del club catalán en la Champions League, el preparador subrayó el papel de Miguel y Arnau para mantener al equipo a flote. Ese día el zurdo marcó el primer gol del partido y este sábado, reubicado a la posición de extremo por la plaga de bajas que azota al Girona, firmó el 1-0 en el minuto 21. A la media hora asistió a Arnau para que anotara el 2-1. Esta temporada ya ha repartido tres asistencias.
Echando la vista un poco más atrás, Arnau marcó y asistió en el triunfo copero del miércoles contra el Extremadura (0-4) y volvió a brillar contra los pepineros en el que su séptimo partido completo consecutivo. Empezó el curso alternando la titularidad con Alejandro Francés, pero la epidemia de bajas de medio campo hacia adelante ha hecho que Míchel le sitúe más arriba para que Arnau responda a la perfección.
"Está más maduro en todos los sentidos. Tiene claro qué debe mejorar y lo está haciendo, en el campo y fuera del campo. Él llegó muy pronto al fútbol profesional por su talento y su inteligencia, pero después se ha dado cuenta de que también necesita trabajar mejor. Ahora es un crack en ese sentido", comentaba el míster tras vencer 1-0 a Las Palmas.
Arnau, con 21 años, ya ha sido capitán siete veces este curso, seis en LaLiga más una en la Champions, y ya es uno de los 20 jugadores de toda la historia del club con más partidos en el fútbol profesional: 136, con 8 goles y más de 15 asistencias, desde su debut en 2020, de la mano de Francisco Rodríguez. Esta temporada ha jugado 996 minutos, de 1.440. Solo le superan David López (1.168), Miguel (1.305), que ha completado 11 de los 12 partidos de LaLiga y los tres de la Liga de Campeones, y Paulo Gazzaniga (1.350).