El oportunismo de Phil Foden, su noveno tanto en la Premier League aprovechando un balón muerto a la potencia sin premio de Erling Haaland, salvó un mal día del Manchester City, dando forma al triunfo sufrido de Pep Guardiola sobre Andoni Iraola, que desfiguró en la segunda parte a su rival y mereció un mejor resultado.
Y quizás, fruto de la tensión que vivieron los dos técnicos españoles en el partido, se produjo un momento tan sorprendente como inesperado al finalizar el choque. Ambos técnicos se despidieron dándose la mano pero más por cortesía que por ganas de hacerlo. Porque ninguno miró al otro a la cara, ninguno se dijo nada y el acto duró milésimas de segundos.
Y como era de esperar, las imágenes ya han empezado a correr como la pólvora por las redes sociales y son muchos los que están defendiendo al extécnico del Rayo Vallecano, valorando el buen papel de los suyos ante el todopoderoso City.
Resultó muy llamativo porque, en la previa del encuentro, ambos se alabaron en las ruedas de prensa: "Siempre es un partido difícil por la forma en que juegan. Será completamente diferente a cuando jugamos en el Etihad. Cuando jugamos contra Bournemouth, en la segunda mitad cambiaron completamente, los jugadores entendieron lo que quería y jugaron muy bien. Son muy vivos, agresivos y bien organizados. Son un buen equipo. Iraola hizo un trabajo increíble en España", manifestó Pep antes del choque.
“Probablemente, (el Manchester City) es el mejor equipo del mundo. Siempre digo que el fútbol de los clubes está un poco por encima del fútbol de selecciones, porque te da tiempo a trabajarlo más, y ahora mismo son los campeones de todo prácticamente. Hay que prepararse para muchos escenarios. Aparte de que son muy buenos, llevan muchísimo tiempo trabajando juntos y tienen todos los escenarios muy trabajados", apuntó el técnico vasco.
Y cuestionado por las palabras de Pep hacia él, añadió lo siguiente: “Para mí, más que los elogios, ya que si le preguntan por mí pues no sueles hablar mal de otros compañeros de trabajo, es tener la oportunidad de enfrentarme a él. Al final, no sé si es el mejor entrenador o uno de los mejores del mundo, y el tener la oportunidad de probar cosas, de dificultarle el partido… Es una de las razones por las que también estoy aquí en la Premier League, para poder enfrentarme a este tipo de entrenadores”. Por el momento, en las dos veces que se han medido ha ganado Pep.