Lionel Messi y su Inter de Miami plagado de estrellas y amigos del astro argentino han sufrido su primer pinchazo de su segunda campaña en la MLS esta noche ante un equipo histórico de la liga norteamericana, Los Angeles Galaxy, con el que no han podido pasar del empate en el estadio de los californianos, en el que era el segundo partido de los de Miami, que arrancaron el torneo el pasado jueves ante el Real Salt Lake, al que dominaron con un contundente 2 a 0, algo que no han podido plasmar esta noche, ya que se han encontrado a un jugador muy entonado enfrente, un viejo conocido de las estrellas de los de Florida, que compartieron vestuario con él en el Fútbol Club Barcelona, Riqui Puig.
El joven catalán se ha convertido en uno de los grandes del fútbol en Estados Unidos, y parece que la apuesta de marcharse a una competición tan exótica y acostumbrada a que sean los veteranos los que marchen a vivir sus últimos años allí. No como Puig, que con 24 años está afrontando su tercera campaña tras cruzar el charco. En sus 40 partidos en el equipo galáctico, son ya 10 tantos y 6 asistencias los que ha producido. Aunque esta noche no ha podido materializarlo, si que ha sido el mejor de los suyos ante el equipo más famoso de todos cuantos participan allí.
El duelo fue muy vistoso, pero no fue hasta el minuto 75 cuando el serbio Dejan Joveljic abrió la lata, pero una expulsión en el minuto 88 de Mark Delgado dio opciones a los del Tata Martino, que lo aprovecharon. En el minuto 92, aparecieron los galones y la calidad de jugadores a los que la edad ya les ha dado algún aviso, pero siguen manteniendo la clase que antaño demostraron. Fue Jordi Alba el que ganó línea de fondo y puso un centro atrás para que Leo Messi llegara desde atrás y mandara el balón a guardar. Una jugada que tantas veces hemos visto en el Camp Nou y en muchos campos europeos, donde hicieron de esta la seña de identidad de una conexión que ya es parte consustancial de la historia del balompié. Una "genialidad" tal y como la calificó el 'Tata' tras la contienda. No fue el mejor día de las otras dos leyendas de la plantilla, Sergio Busquets y Luis Suárez, que no estuvieron tan destacados como sus compañeros.