Tiene potencial sobrado y comienza a demostrarlo con regularidad. Mason Greenwood ha caído de pie en Francia y ya brilla en las filas del Olympique de Marsella. Acumula cinco goles y una asistencia en seis encuentros de Ligue 1 y está dando continuidad a la imagen mostrada el curso anterior en el Getafe. A las órdenes de José Bordalás se reencontró como futbolista y su rendimiento no pasó desapercibido. Con las puertas del Manchester United cerradas de manera definitiva por sus problemas extradeportivos, fue el combinado galo el que se llevó el gato al agua asegurando su fichaje por 31,6 millones de euros y un contrato de cinco temporadas.
Pero parece complicado que el futbolista llegue a cumplirlo en su totalidad. Está en la agenda de clubes punteros de Europa y su progresión meteórica sigue en aumento. El Olympique de Marsella tiene un tesoro y se lo quieren arrebatar. Greenwood está feliz y centrado exclusivamente en el fútbol. Se le nota cuando sale al campo. Su equipo es actualmente tercer clasificado con 13 puntos, no juega competición europea y el objetivo es clasificarse para ella el año próximo.
En el plano individual la vida le sonríe a Mason Greenwood. Esos citados cinco goles en el inicio de temporada le mantienen como uno de los máximos goleadores de la liga. Sólo es superado por Barcola (PSG con seis diana) y lleva las mismas que Jonathan David del Lille. Este buen papel no pasa inadvertido y según informa el rotativo británico The Sun, FC Barcelona y París Saint-Germain lo tienen en su lista de candidatos de cara al verano.
Habla el medio inglés que el Barça estaría dispuesto a pagar 60 millones de libras (unos 72 'kilos' en euros) por su traspaso. Sin embargo, Greenwood se ha amoldado bien al país galo: "Mason ama Francia. Lo han recibido con los brazos abiertos y está disfrutando de la vida en la liga", dijo una fuente cercana al jugador.
Esto podría aprovecharlo el PSG, que sigue reestructurando su plantilla tras la salida de Kylian Mbappé al Real Madrid. La 'guerra' entre el mastodonte francés y el conjunto azulgrana no ha hecho nada más que empezar. Pero no serán los únicos invitados a esta fiesta. El nombre de Greenwood también resuena en los despachos de Bayern Múnich y Atlético de Madrid.
Este pasado martes Greenwood cumplió 23 años y tiene por delante una carrera vertiginosa para seguir consiguiendo los logros que no le dejaron alcanzar en la Premier League. Cerrada también las puertas de la selección de Inglaterra, el futbolista está tramitando los documentos para jugar con Jamaica, país de origen de sus padres. El renacer del de Bradford es real.