Antonio José Medina4 min lectura"Dolberg me encanta desde que jugaba en el Silkeborg. Y ya lo manejábamos en invierno, pero el Niza no lo dejaba salir. Cuando hemos visto la oportunidad hemos ido a por él, porque a mí personalmente me encanta y responde al perfil que el míster quiere", indicaba el entonces director deportivo del Sevilla, Monchi, tras confirmar la llegada del internacional danés en el último momento del pasado mercado estival.
Palabras optimistas para un fichaje que se vio como una versión 'low cost' de los Raúl de Tomás, Lucas Boyé, Umar Sadiq... cuyo precio no bajaba de los 15 millones de euros, algo que el Sevilla no podía gastarse entonces para un 'tercer delantero' que acompañara a En-Nesyri y Rafa Mir y supliera la marcha de Luuk de Jong.
El danés era el perfil que tantas veces, con éxito, había firmado. Jugador que triunfa en un equipo de nivel, el Ajax en su caso, y que da el salto a una de las cinco grandes ligas a base de talonario -el Niza pagó más de 20 kilos por su pase-, pero que pierde protagonismo, el sitio y se vuelve asequible. Muchos jugadores han llegado así en los últimos años. El último, Loïc Badé. Inaccesible pocos meses antes de que llegara cedido y con unas condiciones muy buenas de compra.
Pero a diferencia del central francés, Kasper Dolberg demostró que esa 'bajada de nivel' se mantenía y no hizo mucho por revertir la situación. Incluso, cuando llegó Sampaoli, éste lo situó como su primer delantero, ya que era el que mejor conocía y sabía de su potencial por haberlo visto jugar en la Ligue 1 francesa. Pero tardó medio partido en darse cuenta que aquel Dolberg no es el que tenía delante.
Fue al Mundial y ya no regresó. Busco otro resurgimiento en el Hoffenheim, donde jugó un poco más que en el Sevilla, pero sus dos goles en 14 partidos (415 minutos) le 'sentenciaban' a volver al Niza, donde aún le queda un año de contrato.
El equipo francés, al menos, no tendrá que aguardar al último día de mercado para buscarle esta vez acomodo. El jugador se marchará al Anderlecht belga y se desvinculará definitivamente del cuadro de la Costa Azul. Según publica el medio galo Nice Matin, ya habría acuerdo entre ambos clubes. L'Equipe, incluso, va más allá y asegura que el conjunto belga va a pagar 5 millones de traspaso. Una cifra alta para un jugador que no ha rendido en sus últimas cesiones, que ha tenido problemas de lesiones y que sólo lleva dos goles en el último año. Y más cuando sólo tiene un valor de mercado de 7 kilos y le quedaba un año de contrato.
Sea ese u otro su precio, Dolberg sale de las cinco grandes ligas después de cuatro años en ellas. Con sólo 25 años tendrá que empujar de nuevo si quiere recuperar ese terreno que ha perdido.