Uno de los mejores partidos que nos ha regalado la Eurocopa en esta ronda de octavos de final fue, sin duda, el que la cerró en la noche del pasado martes. Austria y Turquía, dos selecciones que habían enamorado y generado mucha ilusión con su puesta en escena en la fase de grupos se veían las caras en lo que parecía que iba a ser un duelo por todo lo alto. Finalmente, con una gran actuación de la que está siendo una de las estrellas del campeonato (Arda Güler) y un doblete de Demiral, Turquía se encarama a los cuartos de final donde se las verá con Países Bajos el próximo sábado a las 21:00 horas.
Pero precisamente la estrella de la noche en clave turca puede ser sancionado por la UEFA en los próximos días si el máximo organismo del fútbol europeo es consecuente y sigue el mismo protocolo que en casos anteriores durante este mismo torneo. Y es que Merih Demiral recibió todas las miradas cuando anotó el segundo gol de su país y ante los austríacos debido a una polémica celebración. Hizo el más que famoso 'saludo del lobo', que consiste en levantar ambos brazos, levantar los dedos índice y meñique, y apretar el pulgar contra el anular y el corazón, formando un hocico de un lobo. Es famoso por pertenecer y representar a los 'Lobos Grises'. Estos se componen como una organización paramilitar de extrema derecha en Turquía ligada al Partido del Movimiento Nacional.
Pronunciarse políticamente en el terreno de juego no está suponiendo buenas noticias para los protagonistas en esta Eurocopa. El nombre de 'Lobos Grises' lo atribuye la Oficina Federal para la Protección de la Constitución en Alemania. El mayor organigrama del fútbol europeo ya ha sancionado a algún que otro jugador por gestos parecidos. Sin ir más lejos, queda como ejemplo lo que le sucedió al delantero albanés Milind Daku después de incitar a sus aficionados a corear cánticos nacionalistas.
Aunque Demiral, lejos de arrepentirse, manda un aviso: “Por supuesto que estoy muy contento de haber marcado dos goles. La forma en que lo celebré tuvo algo que ver con mi identidad turca. Vi gente en el estadio que también hizo este gesto. Espero tener más oportunidades de hacer este gesto. No hay ningún mensaje oculto. Sólo quería mostrar lo feliz que soy y lo feliz que soy”, comentó sobre una acción que está prohibida en Austria y Alemania.