Tras terminar el partido y producirse la invasión de campo de los ultras del Espanyol para interrumpir la celebración culé, ha tomado la palabra Mao Ye, consejero delegado del RCD Espanyol para atacar con mucha contundencia lo hecho por estos aficionados: "Pedimos disculpas al mundo del fútbol. Por muy minoritario que sea, esto no representa a nuestro club. Desde la entidad haremos todo lo posible para erradicar esto y que no vuelva a ocurrir en nuestro estadio", concluyó el directivo blanquiazul.
No han gustado nada lo hechos que se han producido a las altas esferas pericas: "Desde el club siempre hemos tomado medidas, somos uno de los clubes más estrictos con la prevención, aunque tenemos que seguir haciendo el trabajo y mejorar todo tipo de deficiencias que pueda haber", manifestó Mao Ye.
También Luis García fue muy contundente con lo ocurrido: "No he visto las imágenes porque siempre que acaba el partido me meto dentro. Me lo han contado. Es algo que no podemos estar orgullosos de ello y que se debe condenar. Se han puesto todas las medidas al alcance del club para contener eso, pero no ha sido posible", afirmó el entrenador del Espanyol tras una dura noche para los suyos. La derrota por 2-4 antes el Barcelona deja muy tocados a los del RCD Stadium.
A cuatro puntos de la salvación con solo 12 en juego hacen muy difícil la permanencia de los pericos: "El equipo está vivo. La parte buena es que estamos a la misma distancia a falta de cuatro partidos. No sirve de nada agachar la cabeza, hay que levantarse y hacer autocrítica. Aún hay tiempo", declaró el técnico. Pero también confesó tras perder el derbi que es un día "muy jodido, difícil y en el que va a costar dormir", y reconoció que el bloque no estuvo "a la altura".
Mao Ye también quiso hablar de la difícil situación que viven los pericos en la clasificación: "Lo que queda es luchar hasta el final. Entendemos el malestar del la afición por los resultados deportivos. Pelearemos mientras tengamos una mínima posibilidad", afirmó el directivo. Luis García le puso un escueto "hasta el final" como fecha hasta la que lo darán todo por evitar el descenso a Segunda División del equipo barcelonés. Rayo Vallecano, Atlético de Madrid, Valencia y Almería serán los últimos cuatro rivales del Espanyol en su lucha por seguir en Primera División una temporada más.