José Antonio Rivero3 min lecturaCarlos Carvalhal, entrenador del Celta de Vigo, pidió desde su llegada a tierras gallegas la incorporación de un delantero que conozca la liga española para que su rendimiento sea desde el primer momento. Luís Campos, asesor deportivo del Celta y del PSG, se puso a trabajar en ello desde el principio del mercado de fichajes invernal, aunque antes tenía que acabar con el problema de Denis Suárez, haciendo entrar en razón al presidente Carlos Mouriño y logrando la salida del futbolista.
Una vez conseguido eso, algo que el club anunció el 30 de enero, Campos tenía varios delanteros sobre la mesa.
Una de las opciones que más gustaba y que se ajustaba a los requisitos del técnico portugués era Karl Toko Ekambi, aunque finalmente no será el ex del Villarreal quien refuerce el ataque celtiña. El elegido es Haris Seferovic.
El ariete suizo, de 30 años de edad, llegará la tarde del 31 de enero a Vigo para cerrar su cesión. Seferovic, que conoce el fútbol español por su paso por la Real Sociedad, estaba a préstamo en el Galatasaray turco, aunque pertenece al Benfica, club que pagó tres millones de euros al Eintracht de Frankfurt el verano de 2017.
La temporada para el delantero internacional suizo no estaba siendo buena, puesto que solo sumaba dos tantos en los 13 partidos que lleva, habiendo marcado los dos goles en copa.
El Celta de Vigo verá así reforzada la posición del '9', para la que ya contaba con Larsen y con Paciencia, ninguno muy acertado de cara a gol, además de la estrella Iago Aspas.
No es la primera vez que Campos se fija en Seferovic, ya que intentó su incorporación para el Celta el verano pasado, algo que no terminó de fraguar.
No todo es de color de rosas en Vigo. A la ansiada llegada del delantero se suma el problema causado por Hugo Mallo. El capitán, que acumula 14 temporadas en el club, tiene ofertas, según 'El Faro de Vigo', del Atlético Mineiro y de la MLS norteamericana, pensando seriamente el dejar el equipo de su vida.
Mallo, que termina contrato a final de temporada, quiere volver a sentirse importante, de ahí su pensamiento de poder dejar el equipo.
Eso sí, con la marcha de Mallo el Celta vería aliviarse su margen salarial, puesto que el lateral tiene uno de los cinco salarios más altos de la plantilla.