Tras aterrizar hace solo un año con la vitola de portero titular, Agustín Marchesín se encuentra en una situación comprometida en el Celta de Vigo. El veterano meta argentino, de 35 años, llegó procedente del Oporto a cambio de poco más de un millón de euros y fue indiscutible en la portería celeste en las 19 primeras jornadas de LaLiga EA Sports, hasta que se rompió el tendón de Aquiles en febrero de 2022. Pero en la presente campaña, a priori, parte como tercer portero en los planes de Rafa Benítez.
Desde que firmó por el club gallego, el técnico madrileño tuvo claro que reforzar la meta era una de las prioridades, pues no las tenía todas consigo en lo que respecta a la recuperación de Marchesín. Por ello, se negoció durante el verano la salida del argentino, pero finalmente no se llegó a ningún acuerdo y el Celta arrancó la competición con Iván Villar como único cancerbero de la primera plantilla y el canterano Carrillo como suplente.
Sobre la bocina, el nuevo entrenador celeste vio cumplido su deseo con el fichaje de Vicente Guaita, petición expresa suya. El ex del Valencia, tras varios años en Inglaterra, llega para apretar a un Villar que a parte en principio como titular. Pero lo que pocos esperaban es que Marchesín se recuperase antes de lo esperado, contando de este modo Benítez con tres porteros en perfecto estado de revista.
El ex preparador del Everton aprovechará el parón por selecciones para analizar este ‘overbooking’ en su portería, pero todos dan por hecho que Marchesín estará a la cola. Así lo entiende el propio meta argentino, que ya busca de hecho un nuevo equipo para salir en el mercado de enero.
En este sentido, desde México se ha informado de un posible regreso del que fuese internacional albiceleste al América, donde militó entre 2017 y 2019, antes de dar el salto a Europa. Sin embargo, en su ex equipo se encontraría con un problema similar al que afronta ahora en el Celta, pues se confía en Luis Ángel Malagón como titular y Marchesín llegaría para adoptar un rol de suplente que no desea.
También se ha apuntado como posible destino en la Liga MX el Cruz Azul, que sí tiene más dudas en su portería dado el irregular rendimiento de Andrés Gudiño y Sebastián Jurado. Pero según el periodista Nahuel Ferreira, lo que realmente está cerca no es un regreso a México, sino a Argentina. Concretamente, a Lanús, equipo con el que Marchesín debutó en la elite tras pasar por su filial, militando en sus filas durante siete temporadas y convirtiéndose en toda una institución en el club.
Para que el actual meta del Celta pueda regresar al conjunto argentino, eso sí, se entiende como indispensable que éste se clasifique para la próxima edición de la Copa Libertadores. De momento, se informa de unos primeros sondeos, pero en ese caso, el regreso de Marchesín a su país natal estará mucho más cerca, solucionando de este modo en el mercado invernal el actual problema de la superpoblada portería del conjunto gallego.