Alberto Viñuela3 min lecturaNo llegaron a buen puerto los recursos enviados por el Cádiz CF ante el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) para intentar dejar sin efecto las sanciones impuestas a Jeremías Conan Ledesma, Iza Carcelén y Diego Ribera, segundo entrenador del club amarillo, tras el acta redactada por el árbitro Alejandro Hernández Hernández después del choque ante el Getafe que se jugó el pasado 10 de marzo.
En aquel partido, el colegiado pitó un penalti a favor del Getafe con el tiempo de descuento ya superado. Ese penalti, el segundo a favor de los azulones, provocó el empate a dos definitivo y causó un grave perjuicio al Cádiz CF. Y además hubo un posible enseñamiento del árbitro a la hora de redactar el acta, sobre todo en el caso de Ledesma, del que aseguró que empujó a un compañero de equipo para que éste golpeara en la espalda del árbitro en el túnel que conduce a los vestuarios.
El intento de la entidad presidida por Manuel Vizcaíno resultó inútil. El club recibió el pasado martes 11 de abril una resolución desestimatoria del TAD sobre los recursos propuestos. Eso conlleva que todos los castigados por el Comité de Competición de la Real Federación Española de Fútbol, con posterior ratificación del Comité de Apelación y ahora del TAD, deben cumplir sus respectivas sanciones de manera íntegra.
Así, el portero Conan Ledesma cumplirá la próxima jornada el cuarto y último partido de suspensión. Después de no poder ser de la partida en los duelos frente al Almería, Sevilla y Betis, no jugará tampoco ante el Real Madrid pero estará disponible para la importante cita con el Espanyol de la trigésima jornada, con los puestos de permanencia en Primera División en juego.
En el caso de Iza Carcelén, pudo participar en el reciente choque contra el Betis al contar con la cautelar concedida por la Justicia ordinaria. Una vez que el TAD ha publicado la sentencia definitiva, el portuense aún deberá cumplir un partido de sanción (le cayeron tres) y no estará tampoco en el choque ante los hombres de Ancelotti.
Diego Ribera, mano derecha de Sergio González en el banquillo amarillo, ha sido sancionado finalmente con cuatro partidos (ya cumplió tres), por lo que no podrá acompañar a su equipo desde el banquillo en el compromiso del próximo sábado y volverá en el siguiente envite, la visita al Espanyol el 21 de abril.
Tras la resolución del TAD, desde el Cádiz CF advierten que estudiarán en las próximas horas los pasos a seguir a nivel jurídico.