Antonio José Medina5 min lecturaDesde que hace dos semanas se filtrara que Antonio Cordón iba a dejar la dirección deportiva verdiblanca, algo que se confirmaría poco después y que abocó a su desvinculación inmediata del Real Betis, no han dejado de surgir dudas sobre qué pasaría con las operaciones que tiene avanzadas y que había negociado hasta ahora el extremeño.
Lógicamente, el nombre de Houssem Aouar, con el que llevan tratando desde el año pasado, es el más llamativo; y otros como el de Johnny Cardoso también están en el punto de mira. Pero no son los únicos y algunos, como en el caso de Iñaki Peña, dependen de demasiadas aristas como para que salgan adelante sin una comunicación fluida.
Xavi Hernández y Mateu Allemany dejaron claro hace tiempo que su idea era renovar al canterano, que acaba contrato a final de temporada y que cumple con las expectativas del Barça como alternativa a Ter Stegen. Incluso, en Barcelona publicaron que ya se había cerrado un principio de acuerdo entre las partes, lo que desalentaba a sus posibles pretendientes, entre ellos el Real Betis.
Pero ese acuerdo no se ha plasmado en papel y el Betis sigue a la expectativa de lo que pueda ocurrir. El portero alicantino apenas ha jugado tres partidos en toda la temporada, dos de Copa en las primeras rondas y uno de Champions intrascendente. No cuenta, como en otros equipos, ni siquiera con jugar los minutos alternativos en los torneos menores y nada hace pensar que algo va a cambiar la próxima temporada. Su idea es encontrar alguien que no sólo confíe en él de palabra sino que lo plasme en hechos y minutos.
El problema del Real Betis no sólo es la ausencia de Antonio Cordón, quien curiosamente hay quien sigue relacionando como futurible del Barça, la cuestión es que tampoco tiene claro qué porteros tendrá la próxima temporada.
La continuidad automática de Claudio Bravo por el número de partidos parece inviable dado que tendría que jugarlo casi todo de aquí al final, pues le quedarían por cumplir aún 12 encuentros. Aunque eso, siendo el meta chileno, no es importante porque si Pellegrini quiere que siga, él está dispuesto a continuar en el Betis como ha dicho en más de una ocasión.
Y la otra cuestión, una posible salida de Rui Silva, sólo se conocería en verano y previa oferta superior a los 12 millones de euros. Es decir, que Iñaki Peña no sabría si tiene 'hueco' hasta muy avanzada la planificación, de ahí las dudas.
El problema, por tanto, para el Real Betis y también para el Barça llega de otro lado, de su exequipo: el Galatasaray. El joven portero de 23 años jugó allí cedido la pasada campaña y llegó a disputar 8 partidos aprovechando la ausencia del 'eterno' portero uruguayo del 'Galata', Fernando Muslera.
El internacional suramericano acaba contrato la próxima temporada, contará con 38 años cuando esto ocurra y el Galatasaray quiere a Iñaki Peña como alternativa, un portero joven que pueda ocupar muchos años su meta y que suceda a Muslera cuando éste diga adiós. Algo que ni Barça, con Ter Stegen cerrado hasta 2025, ni Betis pueden ponerle ahora mismo sobre la mesa.