El Real Betis llega hasta el final con su 'amenaza'

Lo avisaba el presidente, Ángel Haro, el Viernes de Dolores durante la ofrenda floral a la Hermandad de La Misión y lo confirmaba su mano derecha, José Miguel López Catalán, en los prolegómenos del partido de este Domingo de Ramos por la noche en el Metropolitano: el Real Betis seguía y sigue firme en su decisión de acudir a la justicia ordinaria para paralizar la sanción de cuatro partidos a Sergio Canales por valorar como "premeditada" la expulsión que obró Mateu Lahoz en Cádiz. Al fallar en contra Apelación y no conceder la suspensión cautelar el TAD la semana pasada, el cántabro tuvo que cumplir el primero de los encuentros frente al Atlético de Madrid, pero la entidad heliopolitana se ha movido este Lunes Santo para cumplir su 'amenaza' de pedir a un juzgado convencional que permita al '10' jugar mientras la última instancia de la jurisdicción deportiva española emite un fallo en firme.

Lo que se conoce como 'cautelarísima', que ya consiguió el Barcelona en vísperas de la pasada Nochevieja para que Lewandowski jugase el derbi ante el Espanyol, aunque el castigo entonces (tres compromisos) hubo de cumplirse igualmente, aunque en las tres primeras jornadas de 2023. Los culés, a los que su eterno rival denunció por alineación indebida sin éxito, acudieron al Tribunal Central de lo Contencioso de Madrid, una vía que ahora explora el Betis con la esperanza de que prosperen sus reclamaciones, desatendidas por el peldaño siguiente al Comité de Competición. De obtener esa suspensión de la pena (que ya le concedió, por ejemplo, el propio TAD con el cierre parcial del Benito Villamarín por el grave incidente del último derbi cainita de la Copa del Rey, que quedó finalmente anulado), Canales podría estar el próximo Domingo de Resurrección (16:15 horas) contra el Cádiz.

Fuentes federativas aclaran a ESTADIO que el asunto debe tener poco recorrido, con un fallo urgente y firme del Tribunal Administrativo del Deporte, aunque la Semana Santa podría retrasarlo a la semana que viene, por lo que el afectado sería el Betis-Espanyol del sábado 15 de abril. Después, vendrían los choques ante Osasuna en Pamplona, Real Sociedad en casa y Barcelona en el Camp Nou. La institución hispalense argumentó no ya que la prueba videográfica (unas declaraciones del centrocampista santanderino tras el Betis-Valladolid a DAZN) fue mal transcrita por el responsable arbitral, ya que nunca llega a pronunciar correctamente la palabra "premeditada", queriendo decir "precipitada", como bien corrigió luego en otras intervenciones posteriores. Además, en la planta noble del Benito Villamarín denunciaban la falta de tiempo para articular un recurso pormenorizado, así que exigirá ahora, si consigue la 'cautelarísima', unos plazos más lógicos para ganar tiempo. Con la tranquilidad también de que, en ese escenario, no prosperaría una reclamación por alineación indebida, como ocurrió con la del Espanyol al Barça, y que la UEFA o la FIFA no tomarán medidas, ya que en sus reglamentos condenan el acceso a los tribunales ordinarios con sus decisiones, pero dejan abierta la puerta a leyes de mayor rango en el caso de sus filiales nacionales.