El primer amistoso de pretemporada del Betis, disputado el sábado ante el Austria Salzburgo y que terminó con goleada (1-5), dejó pistas interesantes del nuevo proyecto y la forma de proceder de Pellegrini con los futbolistas que se encuentran a día de hoy en una situación controvertida, casos de Juanmi Jiménez y Youssouf Sabaly.
El club los ha situado a ambos en la rampa de salida, pero ambos han comunicado a la entidad -el lateral también de forma pública- su deseo continuar en el Betis y ganarse un sitio en el once de Pellegrini.
El de Coín regresa tras dos cesiones la campaña pasada, primero en Arabia Saudí y después en el Cádiz y, lo ha hecho con la intención de recuperar el protagonismo que llegó a tener años atrás con el técnico chileno a pesar de que el plan del club es encontrarle un nuevo acomodo, como ha ocurrido con Borja Iglesias, cedido al Celta.
Por otro lado, el internacional senegalés no es un futbolista que disguste al chileno, pero le falta continuidad y la dirección deportiva y el cuerpo técnico coinciden en que su salida resultaría conveniente para hacerle sitio a Pablo Maffeo, prioridad para reforzar el carril diestro.
La decisión de Pellegrini
En dicho contexto, el preparador ha adoptado una postura muy diferente a la del Sevilla con los descartes y lejos de apartarlos de los amistosos, el Ingeniero les otorgó ayer a ambos la titularidad, lo que puede llevar a la confusión, pero que realmente tiene mucho sentido. Primero porque los sitúa en el escaparate en pleno mercado de fichajes y segundo porque les ofrece la oportunidad de mostrarse aunque las cartas estén marcada, fomentando la competencia y la competitividad.
Una ocasión que Juanmi aprovechó para destacar en la primera parte del choque, muy activo en todo momento, reflejo de sus ganas de convencer al chileno. Generó peligro y se asoció bien en ataque.
Sabaly apareció menos, sobre todo porque el protagonismo en su banda lo acaparó un pletórico Aitor Ruibal, si bien tampoco desentonó en un momento crucial en su futuro.
Esta medida adoptada por Pellegrini favorece los intereses del club, que, de momento, mantiene su intención de desprenderse del delantero y del carrilero.