El dinero disponible en caja para rematar la planificación

Avisaba Ángel Haro tras la junta de accionistas pre navideña de que no esperaba tanto movimiento en el mercado invernal, en parte porque el Real Betis tenía presupuestados unos 20 millones de euros en plusvalías antes de terminar la temporada, de modo que se procurarían ventas importantes, aunque, por decirlo de alguna forma, para consumo interno en pos de cuadrar las cuentas. Desde que cerró la ventana veraniega, de La Palmera se han marchado ya tres futbolistas con dinero de por medio: Rodri Sánchez al Al-Arabi qatarí a cambio de 8,5 millones de euros; Assane Diao al Como 1907 italiano por 11,5 millones (el 80% del pase); y la cesión de Rui Silva al Sporting CP con obligación de compra de 4,75 millones más uno en variables. A efectos contables para LaLiga y su LCPD, las tres operaciones se toman como si fueran traspasos, pues las garantías bancarias 'aseguran' esos ingresos extraordinarios.

Como quiera que los verdiblancos alcanzaron la regla 1:1 con el regreso a River Plate de Germán Pezzella, todo lo que recauden en las transacciones y el salario que ahorren puede reinvertirse, si bien ya ha quedado claro que no será así. Y, aunque institucionalmente se podría tomar la decisión, por poner un ejemplo, de dejar en el cajón 10 millones ahora y buscar los otros 10 millones con alguna venta antes del 30 de junio de 2025, no habría necesidad. Según el recuento aproximado que ha realizado ESTADIO Deportivo, el impacto de esos tres movimientos producirá un beneficio de más de 32 millones de euros, teniendo en consideración que no existía amortización pendiente por ninguno de ellos, pues el portero llegó a coste cero tras finalizar vinculación con el Granada CF y tanto el mediapunta como el atacante promocionaron desde el filial, al que arribaron libres.

En ese montante se incluyen los sueldos que ya no tendrán que abonar al luso (que tenía firmado hasta 2026), el extremeño (hasta 2028) y el hispano-senegalés (hasta 2027), calculados e incluidos en las partidas destinadas los años presente y venideros a la primera plantilla y que repercutirán positivamente en un presupuesto, eso sí, que podría tener que ajustarse si no se alcanzar las semifinales de la Europa League y sus correspondientes ganancias. Encima, el próximo verano hay opciones de compra por satisfacer que necesitarán fondos extra (25 millones por el 80% de los derechos de Vitor Roque y nueve millones por el pase total de Natan de Souza), pero, descontando los menos de dos millones de euros netos de los que se hará cargo el Real Betis del salario de Antony Matheus dos Santos y los mencionados veinte millones para el equilibrio contable, aún habría otros diez millones para un delantero y, si se alinean los astros (con un par de salidas más), un lateral izquierdo.