No está Guido Rodríguez, pese a lo que se publicaba esta semana en Italia, entre los objetivos del Milan, que tiene decidido invertir a partir de ahora en jugadores menores de esa edad y más revalorizables. Un problema menos para el Real Betis, dado el nombre y el potencial tanto deportivo como económico del club lombardo. El pivote, no obstante, sigue sin renovar, por lo que acabaría contrato el 30 de junio de 2024 y se aproxima a la última ventana de transferencias en la que será posible sacarle réditos. Tiene predicamento el campeón del Mundo en la Premier League y la Serie A, donde hoy otras entidades que no son tan reacia a apostar por treintañeros ante su búsqueda de rendimiento inmediato. Inter y Nápoles tomaron posiciones, pero no han hecho propuestas, como tampoco un Barcelona que, desde su entorno, descartaban recientemente a ESTADIO Deportivo, si bien la prensa local insiste.
La imposibilidad de fichar a Zubimendi, el favorito de Xavi Hernández para sustituir a Busquets, ha abierto el abanico a otros centrocampistas defensivos, con Brozovic y Guido como alternativas, pues Amrabat y Rúben Neves no acaban de convencer al técnico culé. La familia Sabbag, los representantes del italo-argentino, continúa sin noticias de Laporta o Alemany. Tampoco en la planta noble del Benito Villamarín se tiene constancia de este interés, incluso con la presencia de un nexo sencillo como Ramón Planes, que ejerció hace nada en Can Barça. No parecen ir los tiros por ahí, aunque nunca se sabe, por lo que la agencia que asesora al de Sáenz Peña está dilatando las gestiones con los heliopolitanos para renovar hasta 2026. Algunas fuentes, en cambio, se decantan por la continuidad del pivote criado en River Plate, que no tiene en estos momentos nada mejor y que se encuentra muy a gusto en la capital hispalense.
De hecho, el hipotético acuerdo podría consistir, como ocurrió con la prolongación de William Carvalho en agosto del año pasado, en una rebaja sustancial de su cláusula de rescisión, actualmente de 80 millones de euros, para favorecer una salida en términos más asumibles, pero protegiendo la necesidad bética de hacer caja. Ahora mismo, tras desembolsar tres millones fijos y otros tantos en objetivos al América, una venta por una cantidad no demasiado alta sería poco interesante para los verdiblancos, que perderían a un jugador indiscutible para Manuel Pellegrini y apenas podrían reinvertir las ganancias, habida cuenta de que los azulcrema conservan el 30% del pase, un 20% del cual está al alcance hispalense por una cantidad módica, mientras que los 'Millonarios' se llevarían casi todos los derechos de formación.