Aitor Torvisco5 min lecturaUna de las preguntas que más se hacen en Vigo es compartida con lo que piensan en Sevilla, en la otra punta de la península. ¿Qué pasará con Borja Iglesias el próximo verano? LaLiga se marchó al parón con un duelo entre el Real Betis y el RC Celta de Vigo en el que fue el regreso del Panda al Benito Villamarín, donde repartió abrazos entre sus 'amigos rivales' y mostró su gratitud después de recibir una enorme muestra de cariño por parte de la afición local. En el equipo gallego está cedido hasta el próximo 30 de junio y, cuando acabe el préstamo, aún le quedaran dos cursos más de vinculación con los verdiblancos. En Balaídos, donde también resuena la opción de repescar a Iker Losada, ya echan cuentas para calcular cuánto le costaría retener al delantero mientras esperan la decisión que deben tomar en Heliópolis.
El director deportivo del RC Celta, Marcos Garcés, ha concedido una extensa entrevista al diario AS en la que ha sido preguntado de manera directa si va a intentar ficha a Borja Iglesias. Su respuesta ha sido un 'sí pero no', dando a entender que todo dependará de la cantidad que pida el Betis, siempre que Manuel Pellegrini no cambie de opinión y diga en verano que quiere quedarse de nuevo con el Panda. "Quieres que ande bien, pero no tan bien porque va a salir más caro. Todo lo que diga ahora son especulaciones. Tenemos que esperar a que llegue el momento y sentarnos a ver", ha respondido el dirigente del club celeste, que se mantiene a la expectativa.
Borja Iglesias sabe que va a tener muy difícil convencer a Pellegrini. Si su situación no se resuelve antes, su obligación es volver el próximo verano para iniciar la pretemporada y volver a luchar por un puesto, pero ya está viendo con su amigo Juanmi que una vez perdido el sitio se puede luchar por tener minutos pero es muy difícil volver a tener el rol de hace sólo un par de años. El Panda se fue al Bayer Leverkusen en enero y en agosto recaló en el RC Celta consciente de que ese cambio de rol invitaba a todas las partes a mover ficha, pero no tiene ningún problema con el técnico chileno ni con ninguno de sus compañeros. Tampoco con el beticismo, más allá de alguna pitada cuando no le salían las cosas. El cariño mutuo quedó claro en el duelo de hace 10 días y no tendría ningún problema en regresar. Otra cosa es que sea o no lo más conveniente para ambas partes.
Borja, de 31 años, está recuperando sensaciones con el '7' celtiña a la espalda. Suma cuatro tantos en 692 minutos repartidos en 13 partidos, nueve de ellos como titular. Vuelve a tener continuidad, se le ve participativo en el campo y es evidente que él también ve esta cesión como una excelente oportunidad para mostrarse, reivindicarse y ganarse un rol protagonista para la 25/26. En el Betis, en el Celta o en cualquier otro club que apueste por hacerse con sus servicios. Después de dos préstamos seguidos, la idea inicial del Betis será buscar un traspaso.
El precio, como bien augura Garcés, dependerá de su rendimiento esta temporada; pero como poco deberá hacer que el club verdiblanco termine de liquidar la amortización de los 28 millones de euros de su fichaje en el verano de 2019, que según las matemáticas básicas rondarían los 3,5 millones de euros anuales. Según ha podido confirmar ESTADIO Deportivo, antes de salir a Vigo el club ejerció su opción unilateral para prorrogar su contrato desde 2026 hasta 2027, por lo que la cuenta habría que hacerla dividida entre ocho y quedarían aún dos plazos.