Temporada para olvidar la de Borja Iglesias, que, pese a marcharse a finales de enero al Bayer Leverkusen, continúa con los mismos números (malísimos) con los que dejó el Real Betis. Los dos goles (al Villanovense, en la Copa del Rey, y al Aris Limassol, en la Europa League) y las dos asistencias (a Marc Roca en Getafe y a Miranda ante el Rangers) amenazan con quedarse estancadas en su rendimiento, que, lógicamente, no invita a que el campeón alemán ejerza la opción de compra registrada en su contrato de cesión, que llegaría a los ocho millones de euros con los bonus incluidos. El delantero gallego conoce mejor que nadie su mal momento, por lo que, a la hora de hacer balance, derrochó sinceridad y humildad en su despedida del BayArena, aunque no de los rojinegros. De hecho, la experiencia en tierras germanas multiplicará por dos sus vitrinas... y puede que por tres o cuatro.
Y es que el 'Panda', que podía presumir de la Copa del Rey que ganó en 2022 con los verdiblancos, se ha encontrado ya con una Bundesliga, más allá de no ir convocado en la última jornada ante el Augsburgo, una cosecha que puede triplicar la semana que viene. Porque el conjunto adiestrado con Xabi Alonso, que puede terminar la temporada 23/24 invicta (acaba de abrochar el torneo regular con 28 victorias y seis empates en 34 citas), disputará el próximo miércoles 22 de mayo (21:00 horas) en el Aviva Stadium de Dublín ante el Atalanta la final de la Europa League (9V 3E 0D hasta ahora), con la clasificación para la Champions League como recompensa extra para el ganador; y el sábado 25 (20:00 h) se medirá con el Kaiserlautern en el Olympiastadion de Berlín para redondear un año mágico con el triplete, levantando la DFB Pokal (la Copa de Alemania, donde ganó sus cinco compromisos previos).
"A veces, la vida te lleva por caminos que no esperas. A nivel profesional esta temporada ha sido difícil y a la vez súper productiva para mí. Los grandes momentos son fantásticos para disfrutar, pero los duros son los perfectos para crecer, y ahí me encuentro. He salido de mi zona de confort y me he encontrado en un país nuevo, una liga nueva y un título. Así como casi sin pensarlo. Pero resulta que me he encontrado con gente maravillosa en este proceso. Personas que me han entregado su cariño y profesionales que han confiado en mí desde el minuto uno, haciéndome sentir querido y respetado por ser quien soy y por mi trabajo. Cosa que no es tan sencilla de encontrar. Hoy estoy aquí, con la Meisterschale, cuando hace unos meses ni lo había soñado. Gracias por esto, por la experiencia, por el respeto y el cariño. Supongo que el trabajar cada día y confiar en que ese es el camino, a pesar de lo que piensen de ti o te digan ciertas personas, te regala momentos que nunca te podrías imaginar. Gracias. Danke", escribió Borja en sus redes sociales. Con contrato hasta 2026, le tocará volver al Real Betis y, seguramente, explorar opciones de salida, con el Stuttgart como opción para desandar lo que andará.