“Raúl es muy bueno. Es un delantero centro moderno, porque también es peligroso fuera del área y en situaciones de uno contra uno. Yo lo que más valoro es su esfuerzo diario. Sabe que es titular indiscutible en el Mirandés, pero entrena como el que más para ganarse el puesto. No sé qué le deparará el futuro, pero seguro que cosas buenas. No solo son sus números en cuanto a goles, también las asistencias y los tantos que ha marcado para abrir el marcador. Estamos hablando de un chico debutante en la categoría y menudo rendimiento está dando”, señalaba Joseba Etxeberría después de que el delantero cedido por el Real Betis, Raúl García de Haro, anotase dos goles en el derbi burgalés para darle el triunfo (2-1) y casi la salvación al Mirandés.
El delantero catalán, que en las últimas semanas ha dejado claro que su idea es volver al Betis y tratar de convencer a Manuel Pellegrini de que puede ser el '9' del equipo, se ha convertido, con 17 goles, en el único obstáculo que separa al granadinista Myrto Uzuni del Pichichi de Segunda. A esos goles, Raúl suma siete asistencias, convirtiéndose en el jugador más decisivo de Segunda división.
“Lo que intento es ayudar al equipo con mis goles. Está siendo así y estoy feliz por ello. Salimos bien en la segunda parte, pero nos encontramos con el golazo de Curro -Sánchez-. Metimos pronto y enseguida llegó el segundo. Esa fue la clave”, destacaba tras anotar su tercer doblete de la temporada.
"Estoy tranquilo. Tengo contrato y mi idea es volver allí -al Betis-. Estoy trabajando para que el míster -Pellegrini- confié en mí y me dé la oportunidad, ya veremos en pretemporada qué piensa", señalaba, mandando un aviso a los delanteros del Betis, ahora que Borja Iglesias está en el ojo del huracán pese a que sólo lleva cuatro partidos en blanco, y Willian José vive una mala temporada.
El gol está ausente, en Miranda de Ebro, pero también a apenas 39 kilómetros, en la cercana Vitoria. Allí, otro bético, Rober González se ha reivindicado y ha anotado sus dos primeros goles -ante el Leganés (2-1)-, devolviendo con ello al Alavés a los puestos de ascenso a Primera división.
“Creo que hice un partido muy completo, jugando o no y confío en mí. Trabajo fuerte día a día. En el gol de la victoria me perfilo y veo que el defensor me deja un espacio y lo aprovecho”, asegura el futbolista cedido por el Betis, que dedicaba los goles a su pareja. “Mi familia no pudo estar en el campo porque viven lejos, pero mi novia sí estaba en el estadio. Les dedico los dos goles. Estoy muy contento porque sirvieron para conseguir los tres puntos. Estamos en el buen camino y ahora hay que seguir en esta línea y tratar de conseguir el ascenso”, dijo.
Es el premio al gran trabajo que hace en la sombra, como reconocía su entrenador. "Rober está entrenando muy bien y por fin ha hecho un gran partido. Es muy buen chaval y se lo merece”, comentó sobre él su técnico Luis García Plaza, que le había dado poco protagonismo en los últimos partidos.