El botón está encendido. A menos de seis horas para que ruede el balón sobre el césped del estadio Benito Villamarín, es un día de corazones palpitantes en la capital de Andalucía. Agitados latidos en verde y blanco, en una mitad de la ciudad; percusión de bombeos en blanco y rojo, en la otra media. No es un partido más. No es un derbi cualquiera. Este domingo, 30 de marzo, se juega El Gran Derbi, un escenario inigualable cuya repercusión traspasa fronteras con independencia del momento que vivan uno u otro. La leyenda de los duelos cainitas hispalenses es una lección que los nuevos ya traen aprendida antes de aterrizar en Heliópolis o Nervión. Y, si alguno no lo había captado del todo, ahí están las espectaculares imágenes de los entrenamientos a puerta abierta de este pasado sábado, en el coliseo de La Palmera y en el Sánchez-Pizjuán. Este choque mueve pasiones y Antony Matheus da Silva las tiene todas 'on fire'. "¿Qué presión?", pregunta. Lejos de intimidarle las llamas, es de los que se siente cómodo caminando descalzo sobre las brasas.
El extremo brasileño ha caído de pie en el Real Betis, que ya lucha por lograr su continuidad la próxima temporada después de deleitarse con cuatro goles y cuatro asistencias en apenas 11 partidos. Qué mejor manera de corroborar este iluminado momento tras años duros en el Manchester United que en un derbi ante el Sevilla FC. Antony, titular indiscutible para Manuel Pellegrini, está motivadísimo. Así lo ha demostrado en una entrevista publicada por los medios de LaLiga a pocas horas de que arranque el duelo de máxima rivalidad sevillana en el que está llamado a ser uno de los principales focos de atención.
"Sé que los derbis son increíbles. Siendo honesto, estoy muy ansioso por este partido. Sé que tiene una importancia muy grande. Yo soy una persona que tiene muchos sentimientos y aquí en el Betis la afición es puro sentimiento. Está siempre con nosotros y eso es muy importante. El derbi es un partido que me encanta. Sé que cuando entre en el campo hay que dejarse la vida", explica el atacante paulista, que jugará por primera vez ante el Sevilla FC y acepta el reto de ser protagonista.
"Estoy muy encantado con todo, con el club, con la ciudad, con la afición... Tuve más propuestas importantes, sí, pero cuando surgió el Betis yo sentí una gran tranquilidad, una certeza en mi corazón", ha reconocido al ser preguntado por los motivos de su manifiesta predisposición a quedarse la próxima temporada. "Es importante marcar, es importante dar asistencias, pero lo más importante es estar feliz conmigo mismo y aquí en el Betis todos los días estoy muy feliz", añade.
"Cuando me preguntan sobre la presión, digo '¿Qué presión?' Enfrenté la presión en la favela cuando no tenía zapatos para jugar, jugué contra narcotraficantes y todo. Eso era presión real. Cuando salía por la mañana para ir a la escuela, a menudo ni siquiera comía. Así que cuando paso por momentos difíciles siempre pienso en los desafíos que superé en el pasado", concluyó, antes de posar de manera eufórica con una camiseta, la de las trece barras, que piensa defender "a muerte".
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